■ Avanza 90% la revisión del contrato laboral; falta sólo el aspecto económico: líder sindical
Siguen las pláticas entre el sindicato de electricistas y LFC para evitar la huelga
A pocos días de que se venza el emplazamiento a huelga, el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) y Luz y Fuerza del Centro (LFC) llevan un avance de 90 por ciento en la revisión de las cláusulas del contrato laboral, señaló anoche Fernando Amezcua Castillo, secretario del exterior del citado gremio, quien indicó que, no obstante, resta abordar el aspecto económico, que podría comenzar a analizarse el jueves, y consta, entre otros aspectos, de una demanda salarial de 16 por ciento.
El mediodía del próximo domingo concluye el plazo para que las partes lleguen a un acuerdo para evitar la huelga y no sea suspendido el servicio eléctrico en la zona centro del país.
Sin embargo, el suministro estaría garantizado para los hospitales, plantas de bombeo de aguas residuales y para algunas dependencias de gobierno, y de esto se harán cargo 4 mil 500 trabajadores propuestos por LFC en una audiencia el pasado 6 de marzo en la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje.
En entrevista, Amezcua señaló que la junta falló por la propuesta que la empresa hizo de asignar al personal de emergencia, compuesto por 80 por ciento de sindicalizados de LFC y sólo 20 por ciento de confianza. Agregó que esto puede abrir un resquicio para que, de haber huelga, sea declarada inexistente, pues según la ley personal sindicalizado no debe permanecer en las instalaciones.
Desglosó que optar por la propuesta de la empresa y no del sindicato sienta un mal precedente y tachó de “argucia” lo hecho por LFC, la cual, en lugar de proponer sólo personal de confianza, incluyó en su lista una mayoría de personal sindicalizado. Especificó que la oferta del SME estaba formada por personal sindicalizado, pero que éstos trabajadores tendrían un respaldo legal si tuvieran que operar los sistemas en caso de huelga, con el que no cuentan si son propuestos por la empresa.
Recordó que también en la huelga de 1987 las autoridades laborales optaron por la propuesta de la empresa, y agregó que en los cinco días que duró el cese de labores ocurrieron ocho decesos de trabajadores por desconocimiento de la operación del sistema de LFC. En este marco responsabilizó al “gobierno federal” de que si estalla la huelga “haya problemas en nuestras instalaciones o resulten con daños”.
El sindicalista remarcó que pese a la “campaña de linchamiento” en los medios contra el gremio, éste continúa en la mesa de negociación para evitar la huelga, y subrayó que el SME no aceptará que se le imponga el tope salarial de 4.25 por ciento.
Las negociaciones entre las partes se llevan a cabo desde el 15 de febrero y en días previos al vencimiento se extienden todo el día y las primeras horas de la noche. Amezcua recordó que el año pasado la huelga se conjuró a menos de una hora de que venciera el emplazamiento.