■ Es el primer fármaco de su tipo que se perfecciona en México, destaca Lena Ruiz
Científicos de la UNAM desarrollan un anticancerígeno de base metálica
■ Debe superar la fase clínica uno (uso en humanos) para ser aprobado por las autoridades
Ampliar la imagen Cerca de 200 laboratorios comercializan un total de 7 mil medicamentos en más de 12 mil presentaciones, que son prescritos por más de 152 mil médicos y se surten a través de 23 mil 500 farmacias privadas y públicas en todo el país. Imagen de archivo Foto: Carlos Ramos Mamahua
Científicos de la Facultad de Química de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) lograron desarrollar fármacos de base metálica que han probado –in vitro e in vivo– tener actividad anticancerígena en líneas tumorales de tipo cervicouterino, de colon, de mama, de pulmón, leucemia y sarcomas.
El hallazgo de estas sustancias y su aplicación en seres humanos permitiría la elaboración de nuevos medicamentos para combatir neoplasias, afirmó la química Lena Ruiz, creadora de este primer fármaco de base metálica desarrollado en el país.
La científica universitaria ha llamado a su compuesto casiopeína (porque cuenta con una base de cobre) y se caracteriza por ser activo, toda vez que su toxicidad es aguda en el momento en el que se aplica, como sustentan sus investigaciones en animales, pero 15 días después de ser tratados recuperaron los niveles normales en química sanguínea o biometría.
Señaló que se trata de una baja toxicidad que no causa mutaciones. De hecho, precisó, agentes quimioterapéuticos las ocasionan e incluso pueden generar tipos de cáncer nuevos; sin embargo, el grado de mutagénesis del nuevo producto es bajo, destacó.
Otra característica del fármaco es que es más activo con células tumorales que con sanas; además de que su base es mucho más económica que el platino, lo que reduciría el costo final del medicamento, cuyo empleo sólo puede ser aprobado por las autoridades sanitarias una vez que supere su fase experimental en humanos.
La innovación de este compuesto fue utilizar cobre en lugar de platino –elemento ajeno al cuerpo–, que es empleado en la actualidad en algunos medicamentos contra el cáncer. El fármaco con platino, si bien es activo, también es tóxico y tiene efectos permanentes, añadió.
Comentó que ella diseñó los fármacos, luego se generaron las rutas de síntesis y, cuando se les tuvo en frascos purificados, conociendo perfectamente la composición y la estructura, se dedicó a buscar quien los probara, lo que se hizo en la Facultad de Química con la colaboración del Instituto Nacional de Cancerología (Incan).
Informó que a la fecha se han sintetizado alrededor de 100 compuestos de cobre y, con base en los experimentos aplicados por un equipo multidisciplinario, se procedió al desarrollo de los ensayos en los que se han seleccionado ocho moléculas –de las que se tiene el estudio casi completo de dos que están en posibilidades de pasar a la fase clínica uno (en humanos). No obstante, advirtió, hay compuestos activos con efectos secundarios no idóneos para las personas.
La química mencionó que en el desarrollo de este proyecto se han acercado otros grupos de trabajo, de tal manera que, en la propuesta que obtuvo el Premio Canifarma 2007, intervienen 43 investigadores y estudiantes de licenciatura y posgrado.