Cementeras, Pemex y CFE, las que más envenenan en Hidalgo
Ampliar la imagen Vista de la refinería de Tula, que de acuerdo con cifras oficiales es una de las principales fuentes de bióxido de carbono y otros contaminantes en Hidalgo Foto: Carlos Camacho
Pachuca, Hgo., 9 de marzo. La región Tula-Tepeji, que comprende 17 municipios, es la zona de Hidalgo más afectada por contaminantes producidas por empresas cementeras, plantas de Petróleos Mexicanos (Pemex) y de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), según el Registro de Emisiones y Transferencias de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Datos proporcionados por Enrique Díaz Rodríguez, integrante del Consejo Consultivo Ciudadano de Tula, indican que la planta termoeléctrica Francisco Pérez Ríos emite anualmente seis millones 129 mil 92 toneladas de bióxido de carbono, mientras la refinería Miguel Hidalgo despide cada año 3 mil 312 toneladas de bióxido de carbono, 7.2 toneladas de níquel y 134 kilogramos de plomo.
Asimismo, se detalla que las petroquímicas emiten cada año al aire de Hidalgo 44 mil 400 toneladas de bióxido de carbono, 455 kilogramos de cianuro, la misma cantidad de níquel y 113 kilos de plomo.
La cementera Cruz Azul despide anualmente 990 mil 490 toneladas de bióxido de carbono, 11 de benceno, 460 mil kilogramos de plomo y 140 mil kilos de mercurio; la cementera Cemex, ubicada en el municipio de Atotonilco de Tula, emite 849 mil 379 toneladas de bióxido de carbono y 7 toneladas de benceno.
Lafarge, cementera francesa instalada en el municipio de Atotonilco de Tula, emite 244 mil 264 toneladas de bióxido de carbono, y Caleras Bertrán despide 127 mil 100 toneladas anuales.
Durante una reunión con funcionarios de la Secretaría de Salud y del Consejo Consultivo Ciudadano del estado, se denunció que la empresa de carbón activado Clarimex, ubicada cerca de la carretera Tula-Refinería, vierte sus residuos líquidos al canal que irriga los campos de cultivo de la zona.
Jesús Chacón Estrada, médico de la región, demandó en la reunión la intervención inmediata de autoridades gubernamentales de los tres niveles para frenar la contaminación en la zona, y aseguró que ya ha dañado la salud de sus pobladores al causarles “enfermedades mortales”.
El secretario de Salud estatal, Jorge Islas Falcón, anunció que se realizará un programa de evaluación epidemiológica ambiental para determinar con certeza los índices de contaminación y proponer soluciones inmediatas.
Los integrantes de consejo consultivo exigieron que investigadores de instituciones de educación superior realicen sus propios análisis.