■ Funcionarios negocian sólo con grupos afines, con la mira en los comicios de 2009, señalan

El gobierno, sin voluntad política para el diálogo, denuncian opositores al TLCAN

Matilde Pérez U.

Las organizaciones del Movimiento Nacional por la Soberanía Alimentaria y Energética, los Derechos de los Trabajadores y las Libertades Democráticas consideraron que el gobierno de Felipe Calderón “no tiene voluntad política” para atender la agenda sugerida para el diálogo.

El gobierno busca sólo dialogar con “organizaciones afines, amigas, para manejar las políticas públicas, los programas y los presupuestos rurales con intenciones electorales, con miras a los comicios intermedios de 2009”, apuntaron las 40 agrupaciones en un comunicado conjunto.

“Confirmamos que el gobierno no busca subsanar deficiencias y errores del proceso de negociación que se inició en enero de 2007 y quiere que la simulación continúe. Quiere consolidar a Acción Nacional en el poder y fortalecer su gobierno autoritario, antidemocrático”, destacaron.

El pasado día 6, los dirigentes de las organizaciones campesinas, sindicales y sociales que acudieron a la Secretaría de Gobernación con la esperanza de acordar la agenda de discusión de los planteamientos plasmados en el Manifiesto Campesino a la Nación del 1º de enero se levantaron de la mesa luego de que el titular de la dependencia, Juan Camilo Mouriño, abandonó la sesión sin dar respuesta puntual a las demandas.

Ese día, recordaron, “Mouriño se mostró ajeno a los acontecimientos y se retiró a la mitad de la reunión con las organizaciones para cumplir con otros compromisos, y dejó la responsabilidad en manos del secretario del Trabajo, Javier Lozano, y de los titulares de Economía, Eduardo Sojo, y de Agricultura, Alberto Cárdenas”.

A pocas horas de que, según versión del dirigente de la Confederación Nacional Campesina, Cruz López Aguilar, el gobierno responda a la agenda presentada, las organizaciones de dicho movimiento ratificaron las precondiciones para el diálogo: la revisión del capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y de las reglas de operación de los programas de las secretarías de Agricultura (Sagarpa) y de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), como se acordó en el seno del Consejo Mexicano para el Desarrollo Rural Sustentable (CMDRS), así como el establecimiento de un mecanismo de administración de las importaciones y exportaciones de maíz, frijol, leche en polvo y edulcorantes.

Agregaron que las reglas de operación aplicadas por Sagarpa y Semarnat no responden a los acuerdos del CMDRS.

“Son las que autoritariamente impusieron, no las que se convinieron. Mouriño tampoco leyó el manifiesto campesino, y desconocía las precondiciones y el formato que planteamos para el diálogo con el Ejecutivo.”

El movimiento reiteró que el titular de Sagarpa “no es interlocutor válido, pues ha incurrido en constantes mentiras, como decir que las reglas de operación de Sagarpa tienen 85 por ciento de las observaciones de los productores y ha querido minimizar la importancia y legitimidad de las organizaciones campesinas”.

Puntualizaron que ante el fracasado inicio de las negociaciones con el Ejecutivo sostendrán reuniones con la Cámara de Diputados y el Senado, así como con los congresos estatales, en busca de respuestas puntuales a sus planteamientos. Además continuarán su consulta para llevar a cabo en agosto un paro nacional.

Los dirigentes de las organizaciones reiteraron que los agricultores están en pie de lucha para frenar la embestida destructiva del TLCAN, defender la seguridad alimentaria nacional y la gobernabilidad democrática.

Añadieron que en la reunión del día 6 “expresamos ante el secretario Mouriño que aspiramos a un cambo radical, de fondo, de las políticas agroalimentarias, que reviertan el modelo impuesto desde 1982, que ha dañado al campo y la sociedad”.