■ “Ya era hora que el DF se asumiera como centro literario de relieve”
Recibe el escritor Álvaro Uribe el Premio de Novela Elena Poniatowska
Ya era hora de que nuestra capital se asumiera como lo que es: un centro literario de importancia continental, afirmó Álvaro Uribe, previo a su discurso de aceptación el Premio Iberoamericano de Novela Elena Poniatowska de la Ciudad de México, con su libro Expediente del atentado.
El texto narra la historia de un intento de asesinato contra el presidente Porfirio Díaz, en 1897, del cual el autor tuvo noticia al leer las memorias del también escritor Federico Gamboa, y que surgió inicialmente como un relato que posteriormente se transformó en el primer capítulo de esta novela.
Elena Poniatowska dijo que los premios literarios son para incentivar la lectura, “porque leer te da una vida interior y te da armas contra las dificultades de la vida”, tras felicitarse de poder entregar el premio que lleva su nombre.
Porque leer, agregó la autora de La noche de Tlatelolco –del que Uribe dijo que es un libro que marcó a su generación– no sólo permite defender nuestra cultura, sino también al país y sus recursos, como el petróleo.
En la entrega del premio, el cual consiste en 500 mil pesos, que lo hace el más cuantioso a escala nacional para el género de novela, el representante de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana, Carlos Anaya Rosique, reconoció la decisión del gobierno capitalino de crear este galardón, y también destacó la calidad de la novela de Uribe; en tanto que la escritora Mónica Lavín opinó que con esta obra “el premio nace con el pie derecho, al subrayar su vocación por la buena literatura” y deseó larga vida al galardón.
Por su parte, la titular del Instituto de Cultura local, Elena Cepeda, dijo que este premio forma parte de un amplio programa de fomento a la lectura en la capital, y en representación del jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard, hizo un reconocimiento a la aportación de Elena Poniatowska a la cultura del país y a su desinteresada defensa por la justicia social.
Uribe bromeó agradeciendo a quienes le antecedieron en la palabra que no hicieran ellos bromas alusivas a su homónimo, el presidente colombiano, y remarcó: “aquí y ahora no hay más Álvaro Uribe que yo”.
Leyó un texto titulado De mariposas y varias cosas para explicar el proceso que dio origen a Expediente del atentado, que si bien, dijo, no tuvo intenciones autobiográficas, sí la considera como su novela más personal, la cual lo llevó a convertirse en un ávido lector de la historia porfiriana.
“Yo, lo digo sin jactancia, no soy un profesional de la historiografía. Soy un novelista, un cuentero, un perpetuo aprendiz de escritor, y escribo sin esperar siempre a tener cosas premeditadas que decir.”