■ Denuncia el mandatario ecuatoriano presiones de Washington a países durante la crisis

Rafael Correa aboga por la creación de una OEA sin Estados Unidos

■ Dice que se tomará su tiempo y se coordinará con Caracas antes de restablecer vínculos con Bogotá

■ Que el Grupo de Río “se transforme en la Organización de Estados Latinoamericanos”, demanda

Afp, Pl, Reuters y Notimex

Quito, 8 de marzo. Ecuador abogó hoy por la creación de una nueva Organización de Estados Americanos (OEA) sin Estados Unidos, al denunciar las presiones de Washington en favor de Colombia en el organismo durante la crisis diplomática por la incursión militar colombiana en suelo ecuatoriano.

A su regreso a esta capital tras participar en la cumbre del Grupo de Río en República Dominicana, el presidente Rafael Correa advirtió que se tomará su tiempo antes de restablecer las relaciones con Colombia, pese a la superación del conflicto, y estimó que va a ser “muy difícil” restaurar la confianza con Álvaro Uribe.

Aunque se declaró satisfecho de que “el grave” diferendo haya sido solucionado, empezando una “nueva era” para la región, dijo que “necesitamos una OEA conformada sólo por los países del área, es decir, una Organización de Estados Latinoamericanos, y ese podría ser el Grupo de Río”.

Señaló que uno de los problemas del actual ente hemisférico para que no avance más rápido es la presencia allí de Estados Unidos, por lo que tuvo que ser el Grupo de Río el que adoptó una resolución para poner fin al conflicto del ataque colombiano a su territorio, ocurrido el primero de marzo, en el que fue abatido el líder rebelde Raúl Reyes.

Varios presidentes, dijo Correa, le contaron que “habían recibido presiones” de Washington “para que no se metieran en el asunto y dijeran que era un problema bilateral cuando era multilateral”. Debido a esos intentos de bloquear un arreglo, añadió, la OEA sacó una resolución no satisfactoria.

En la reunión del miércoles pasado, la OEA abordó el conflicto ecuatoriano-colombiano, la cual concluyó sin una “condena clara” a Colombia y un acuerdo de ratificación de la soberanía de los países y el nombramiento de una comisión que se espera arribe este domingo a Ecuador para inspeccionar el lugar de los hechos.

El gobernante ecuatoriano subrayó la “lentitud” con que actuó la OEA con respecto a la rapidez del Grupo de Río, que el viernes en Santo Domingo emitió una resolución poniendo fin a la crisis, donde Colombia pidió perdón y se comprometió a no volver a incursionar nunca más en otra nación.

En la reunión en Santo Domingo, apuntó, se planteó la creación de la Organización de Estados Latinoamericanos y que el Grupo de Río “se convierta” en ese nuevo foro. El presidente nicaragüense Daniel Ortega fue uno de los que enarboló la propuesta, dijo.

Respecto de la reanudación de las relaciones diplomáticas con Colombia, subrayó que no lo hará de inmediato y que “se coordinará” con Venezuela tras conversar y hacer un cronograma antes de enviar a su embajador a Bogotá.

Dijo que no será desleal con el presidente Hugo Chávez, quien en apoyo a su gobierno suspendió sus relaciones con Colombia. En tanto, el propio mandatario ecuatoriano había roto todos los lazos oficiales con Colombia el 3 de marzo, a lo que seguiría una medida similar de Nicaragua, ya sin efecto.

Al hacer un balance de los siete días de crisis, apuntó que al ser superada “mantendrá las relaciones por el beneficio de los pueblos”, pero subrayó que será “muy difícil” recuperar la confianza en Uribe, quien lo acusó de tener nexos con la mayor insurgencia colombiana.

Tras reiterar su rechazo a esas pruebas de nexos de su gobierno con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), destacó que la confianza es como un cristal que si se rompe es muy difícil, imposible de reconstruirlo.

Refirió que durante la crisis hubo toda una campaña informativa de Colombia, con el respaldo de los “principales medios vinculados a ciertos intereses” estadunidenses. Añadió que al principio estaban ganando esa batalla, porque “ellos tenían el apoyo estadunidense y todo su poder económico, de inteligencia e informativo”.

Pero al final, Rafael Correa indicó que “estamos tranquilos, felices” de que esto haya terminado, lamentando sólo la pérdida de vidas humanas en el bombardeo colombiano. Dijo confiar en que en América Latina ahora “empieza una nueva era donde primarán los principios, la justicia y el derecho internacional por sobre el poder”.

Por lo demás, confirmó que la misión de la OEA encabezada por su secretario general, José Miguel Insulza, llegará este domingo a Quito, conformada por Argentina, Bahamas, Brasil, Panamá y Perú, cuyos representantes recorrerán el lunes la zona de incursión en la provincia de Sucumbíos.

La misión emitirá después un informe a los cancilleres, que mediante el organismo regional analizarán el tema el 17 de marzo.

El presidente Correa emprenderá el próximo lunes una gira por Chile para firmar acuerdos bilaterales, mientras la justicia ecuatoriana indaga sobre la situación de cinco presuntos guerrilleros colombianos detenidos el jueves pasado en su territorio.