■ Reconoce Ensástiga graves problemas por crecimiento desordenado
Se cambiarán polígonos urbanos, con respeto al entorno natural: delegado de Tláhuac
El gobierno de la delegación Tláhuac tiene previsto modificar los polígonos urbanos y adecuarlos a la nueva realidad que se vive, pero con el compromiso de mantener las áreas de conservación ecológica, para evitar que crezca el deterioro en el entorno natural.
En entrevista, el jefe delegacional, Gilberto Ensástiga, señaló que actualmente se padecen los problemas generados por el crecimiento urbano desordenado de las últimas tres décadas, no sólo del Distrito Federal, sino también del estado de México.
Ubicada en la franja limítrofe de ambas entidades, por su topografía esta delegación fue presa del crecimiento de la mancha urbana y de efectos como la sobrexplotación del manto acuífero y la sobrecarga de aguas residuales, reconoció.
Sin embargo, Ensástiga Santiago apuntó que, a diferencia de los municipios mexiquenses en la zona que forma parte de la llamada cuenca del canal de Acapol, aún existen áreas en términos generales despobladas, y “hay que garantizar que así permanezcan, porque son estratégicas no sólo para la sustentabilidad para delegación, sino para toda la región en su conjunto”.
De hecho, recordó que el Gobierno capitalino proyecta una fuerte inversión para desarrollar un polo ecoturístico en la Sierra de Santa Catarina, de dos mil 800 hectáreas, 750 de las cuales corresponden al área natural protegida y el resto es suelo de conservación, con producción agrícola.
En lo que respecta al gobierno delegacional, señaló que el pasado fin de semana se concluyó la consulta pública para llevar a cabo la actualización del Programa Delegacional de Desarrollo Urbano, en el que se contemplan cambios acordes a la nueva realidad que se vive en Tláhuac.
Con ello, agregó, se podrán garantizar las nuevas obras como la ruta 12 del Metro y la adecuación de vialidades, pero también contener el crecimiento de la mancha urbana, tras precisar que se tienen identificados 93 asentamientos irregulares, en los que habitan cerca de 40 mil pobladores.
“No es una cantidad menor. Están ubicados en suelo que no está autorizado para la vivienda, pero ahí están. Lo que proponemos es modificar el uso de suelo, para consolidarlos y garantizarles mejor condición de vida con los servicios adecuados, pero también detener la invasión en las tierras agrícolas”, puntualizó.
Manifestó que la delegación está obligada a cuidar el entorno natural, pero “también es cierto, que hay lugares donde no es posible rescatar esos espacios, pues se llenaron de viviendas. Una solución es modificar los polígonos urbanos, con el compromiso de que se respetarán”.