■ Ha sido severa crítica de prácticas de EU en la lucha antiterrorista
En la ONU, Arbour dejará el Alto Comisionado para los DH
■ Busca evitar batalla política en torno a cumbre contra el racismo
Ampliar la imagen Arbour finalizará su gestión el 30 de junio, informó The Washington Post. Imagen captada el pasado 8 de febrero en el DF Foto: Carlos Ramos Mamahua
Washington, 3 de marzo. La titular del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Louise Arbour, dejará el cargo el próximo 30 de junio, poniendo fin a una gestión de cuatro años, reveló hoy el diario The Washington Post.
Citando fuentes cercanas a la funcionaria, el matutino indicó que la influencia de Arbour en Naciones Unidas ha disminuido tras la partida del anterior secretario general, Kofi Annan, quien hizo del tema de los derechos humanos una de sus prioridades.
Louise Arbour ha chocado en forma constante con Estados Unidos, en particular por su severa crítica del impacto que tiene la guerra contra el terrorismo sobre la agenda internacional de los derechos humanos.
Arbour, ex fiscal para crímenes de guerra de Naciones Unidas, ha censurado en particular el uso de la tortura de países como Estados Unidos, en el contexto de esa campaña, algo que ha provocado ira dentro del gobierno y el Congreso estadunidenses.
Kristen Silverberg, secretaria de Estado Asistente para Asuntos Internacionales, dijo al diario que resultaba “equivocado sugerir” que la guerra contra el terrorismo sea un tema de crítica en la agenda de los derechos humanos.
“Nos gustaría ver que la Alta Comisionada enfocara más su atención y críticas en los gobiernos abusivos y totalitarios.”
El rotativo reveló que Arbour, canadiense de 61 años, ha dicho a parientes que su separación del cargo obedece a su deseo de pasar más tiempo al lado de su familia.
Pero también busca evitar una nueva batalla política en torno a una cumbre contra al racismo, prevista para el mes próximo en Durban, Sudáfrica.
Estados Unidos, Israel y Ca-nadá han anunciado su intención de boicotear el encuentro, por considerar que se convertirá en un foro para críticas “injustificadas” contra Israel.