■ Ofrecen fuertes sumas a los candidatos para que luego pongan jefes policiacos a modo
El narco financia campañas políticas, pero no hay pesquisas al respecto: SIEDO
El hecho de que la Procuraduría General de la República (PGR) no tenga abierta ninguna investigación sobre el financiamiento del narcotráfico a las campañas políticas no significa que ese delito no se cometa, ya que en las presidencias municipales ofrecen cantidades importantes a cambio de que se designe como titular de la policía local a quien ellos decidan, afirmó Noé Ramírez Mandujano, titular de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO), al participar en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México en un seminario de estudios sobre la reforma penal electoral.
El funcionario aseguró que a los candidatos a presidentes municipales “se acercan los narcotraficantes ofreciéndoles cantidades importantes de dinero, y si obviamente llegan a triunfar tienen un compromiso: poner en la Dirección de Seguridad Pública municipal al hombre que ellos indiquen. Esa es la finalidad de los narcotraficantes.
“El hecho de que (la SIEDO) no tenga un caso (en investigación), no significa que no haya habido. Es como cualquier otro delito en la incidencia criminal. Las cifras negras muchos las ignoran. Los delitos se dan, pero no los conocemos. ¿Por qué? Porque no se denuncian y, a veces, los instrumentos de control no funcionan”, expresó el encargado del combate a la delincuencia organizada de la PGR.
Ramírez Mandujano participó en dicho seminario con una ponencia sobre financiamiento ilícito a las campañas políticas, y en ésta expuso la necesidad de mejorar la legislación en la materia para prevenir la infiltración del narcotráfico en la política.
En ese contexto, puntualizó: “en caso de que un candidato utilice a sabiendas fondos que provienen de actividades ilícitas, estaríamos enfrentando un concurso de delitos o ante la concurrencia de normas incompatibles entre sí y la penalidad aplicable sería baja”.
Ramírez Mandujano añadió: “hemos visto cómo las policías municipales de muchos estados de la República (los narcotraficantes) han logrado controlarlas.
“Hay que recordar que los policías son parte del aparato logístico” de las bandas criminales, añadió el subprocurador.
Abundó que el brazo armado del cártel del Golfo, Los Zetas, en algunos estados paga fuertes cantidades para que los policías den información sobre los operativos.
El funcionario recordó lo que ocurrió en los años 80 en Colombia con Pablo Escobar Gaviria, quien mediante la intimidación y el chantaje logró posicionarse políticamente, y para mantener el control del tráfico de drogas y hasta el arribo de candidatos a cargos de elección popular llevó a cabo lo que se conoció como narcoterrrorismo.