Ofrece el secretario mostrar la información necesaria
“Son acusaciones mezquinas”
Los Cabos, BCS, 28 de febrero. El secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, dijo que pondrá a disposición de las autoridades competentes “toda la información que se me requiera” para que sea emitida una “opinión en el plano legal” respecto del presunto tráfico de influencias (en el periodo diciembre 2002-diciembre 2003), cuando era asesor de Felipe Calderón, entonces secretario de Energía.
El funcionario respondió a las acusaciones que, en ese sentido, documentó Andrés Manuel López Obrador, respecto de un convenio firmado entre Transportes Ivancar, representada por el propio Juan Camilo Mouriño, y Petróleos Mexicanos.
Las aseveraciones del político tabasqueño fueron calificadas por Mouriño de “inmorales, dolosas y mezquinas”. El funcionario argumentó que al tomar posesión como diputado federal renunció a las acciones de las cerca de 80 empresas del grupo encabezado por su padre (con gran influencia en el sureste del país), entre las que se encuentra la transportadora de combustible en referencia.
Dijo que él es el “principal interesado en que se aclare esta situación dolosa”, y aseveró que “jamás” se ha beneficiado ni ha beneficiado indebidamente a nadie desde los cargos públicos que ha ocupado (asesor del secretario de Energía, subsecretario de Electricidad y recientemente jefe de la Oficina de la Presidencia de la República). “Mis actos han sido legales, mi actuar ha sido siempre ético”, afirmó.
Señaló que desde hace 23 años su padre (Carlos Mouriño) decidió emprender un negocio relacionado con Pemex, el cual logró consolidar “gracias al tesón y esfuerzo”. Más tarde, agregó, “tuve responsabilidades en el negocio familiar” a través de posesión de acciones y funciones directivas. En 1997, dijo, “decidí emprender mi propio camino y abrirme paso en la vida pública”.
Mouriño fue primero diputado local en Campeche y enseguida tomó posesión como diputado federal. Hacia finales de 2003 asumió su primera responsabilidad en la administración pública y decidió dedicarse “por completo” a ello, por lo que renunció a las acciones de las empresas propiedad de su familia. Reiteró que la relación mercantil entre la empresa referida y Pemex tiene su origen en 1985, cuando él tenía 14 años de edad. Aseguró que la línea del negocio no ha crecido desde su inicio, sino que la expansión ha ocurrido “desde mucho antes que yo ingresara al servicio público”, con base en la administración de franquicias y negocios inmobiliarios. “Resulta mezquino que se me acuse de beneficiarme económicamente de la política, cuando fue la política la que me motivó a renunciar a un patrimonio legítimo producto del esfuerzo personal y familiar. No perderé el tiempo debatiendo públicamente con mis detractores. Hoy tengo a mi cargo responsabilidades muy importantes y no voy a distraerme”
Mouriño regresó a la ciudad de México para reunirse con sus homólogos de Energía, Hacienda y Trabajo, Georgina Kessel, Agustín Carstens y Javier Lozano, respectivamente, así como con el director de Pemex, Jesús Reyes Heroles.
A su vez, el gobernador de Campeche, Jorge Carlos Hurtado, dijo desconocer presuntas acciones de tráfico de influencias de la familia del secretario de Gobernación. “No tengo conocimiento de una situación particular”, respondió escuetamente al término de una reunión de mandatarios estatales de extracción priísta que acuden a la reunión de la Conago.
(Con información de Georgina Saldierna, Alonso Urrutia y Lorenzo Chim, corresponsal)