El de Pátzcuaro ya es apto para la pesca: Semarnat
Mata contaminación en el lago de Guadalupe 5 mil aves al año
Al menos 5 mil aves perecen anualmente en el santuario del lago de Guadalupe debido a la contaminación del vaso, donde municipios cercanos desfogan aguas negras, informó la organización no gubernamental Sociedad Ecológica de la Región de los Lagos del Valle de México.
El secretario de la organización, Moisés Bolaños, expuso que, según la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el lago de Guadalupe recibe cada año al menos 15 millones de metros cúbicos de aguas negras y residuos sólidos procedentes de municipios aledaños.
Mientras, integrantes de la organización ambientalista Aqua Biosphera, que integra a residentes de fraccionamientos aledaños al lago, informaron que en 2004 murieron al menos 18 toneladas de peces; en febrero y noviembre de 2005 fueron 3.5 y 10 toneladas, respectivamente. En 2006 las autoridades municipales no dieron cifras.
El lago de Guadalupe recibe aguas residuales de municipios cercanos, sobre todo de Nicolás Romero, que no cuenta con un sistema principal de drenaje que evite descargas en el vaso; de Atizapán de Zaragoza y de Cuautitlán Izcalli.
Desde hace más de diez años los gobiernos federal y estatal han prometido la instalación de una planta tratadora de aguas residuales.
En Pátzcuaro, Michoacán, el secretario de Medfio Ambiente y Recursos Naturales, Juan Elvira Quezada, y el presidente del Instituto Mexicano de la Tecnología del Agua, Polioptro Martínez Austria, informaron que los trabajos de recuperación del lago de Pátzcuaro, iniciados en 2003, elevaron el índice de calidad del agua de 54.5 a 68 por ciento, a tal grado que ya es apto para la pesca.
Durante la firma de un convenio con el gobernador Leonel Godoy Rangel para continuar con los trabajos hasta 2012, Martínez Austria informó que 60 por ciento de las aguas del lago son tratadas y se espera llegar a 95 por ciento con la construcción de más plantas de tratamiento en los próximos cuatro años.
Elvira Quezada admitió que la deforestación y la consecuente disminución de cuerpos de agua son un “foco rojo” en la zona. Además, 33 por ciento de la basura no se colecta. Todo ello contribuye a que cuatro especies acuáticas y 32 de vegetales terrestres estén en riesgo de extinción.