Los industriales proponen la revisión ante el desplome en la cotización internacional
Rechazan productores intento de ajustar a la baja el precio de la caña de azúcar
Se quitaría dinero a los pobres para darlo a los ricos, argumentan dirigentes campesinos
Los cañeros de la Confederación Nacional de Productores Rurales (CNPR) no admitirán una reducción en el porcentaje establecido por ley para determinar el precio de la caña, aunque están dispuestos a revisar el marco legal para hacer más transparentes las bases y que los datos sean suficientes, claros y confiables.
Carlos Blackaller Ayala, presidente de la Unión Nacional de Cañeros de la CNPR, dijo que “ya iniciado el primer tiempo, no se pueden ajustar las reglas para el segundo”, en respuesta a la propuesta de la Cámara Nacional de las Industrias Azucarera y Alcoholera para que el precio de la gramínea se fije considerando la baja internacional en la cotización del endulzante.
El dirigente de los productores desmintió a quienes afirman que el costo de la caña de azúcar es demasiado alto debido a que la materia prima tiene un valor de producción elevado. “No se vale ese argumento para restar ingresos a los productores; eso implicaría actuar como un Robin Hood desvirtuado, pues quitaría dinero a los pobres para entregarlo a los ricos”, asentó en conferencia de prensa.
Recordó que el pasado 12 de diciembre, el gobierno federal dio a conocer que el precio de referencia para la caña de azúcar correspondiente a la zafra 2007-2008 es de 5 mil 996 pesos, de los cuales, 57 por ciento –como establece la ley– corresponde al de la caña, por lo que el productor recibirá 3.41 pesos por cada kilogramo de azúcar.
Agregó que en días recientes, la discusión entre cañeros e industriales es por el diferencial de 6 por ciento en el pago de la caña correspondiente a la zafra 2006-2007; “ese dinero corresponde a los cañeros, porque los ingenios, en su momento, tuvieron ventas por encima del precio de referencia de la caña, y ahora tienen que cubrir el diferencial, como establece la ley del sector”.
Los industriales sostienen que en dos meses dejarán de tener liquidez para pagar las preliquidaciones a los cañeros, pero esa situación –dijo– no es por el precio de la caña, sino por el desplome de 15 a 17 por ciento en las cotizaciones de venta del azúcar, debido a la acumulación de inventarios –un millón de toneladas–, por la falta de exportación del dulce.
“Su falta de liquidez es porque no tienen una estrategia adecuada de ventas y están malbaratando el azúcar; es ilógico que hablen de excedentes que distorsionan el precio, cuando la realidad es que no tienen una lógica comercial, y eso está dañando las cotizaciones, pero sin beneficiar al consumidor”, abundó.
Los productores “estamos preocupados por esa baja de los precios ante las posibles consecuencias negativas al sector”, las cuales se verán con mayor claridad en la zafra 2008-2009, y que son motivo ya de alerta por la repercusión económica en 227 municipios de 15 estados. Por ello, recomendó a las autoridades que evalúen no sólo el control de precios al consumidor y la inflación, sino la situación en los mercados nacional e internacional del azúcar, para que se tomen las previsiones necesarias y haya precios más justos para el producto.