La situación de la energía, en fase alarmante, dice el CEESP
La situación energética del país entró en una fase “alarmante”, en la que cada vez más se depende de las importaciones de refinados para satisfacer la demanda nacional, alertó el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
En el documento Análisis estratégico, donde se analiza “el futuro de México ante el fuerte deterioro de las reservas petroleras”, el organismo dependiente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) hizo notar que en las últimas dos décadas las reservas probadas se redujeron en 42 mil millones de barriles, pero “al ser nuestro país un importador creciente de gasolinas y otros petroquímicos, junto con la disminución de las reservas probadas de petróleo, la capacidad del Estado mexicano para hacer frente a los retos energéticos del futuro está en entredicho”.
Sobre todo, con el presupuesto y la capacidad de gestión actual de Pemex, en pocos años se observará un retroceso en la producción de petróleo y gas que resultará en la transformación del país, al pasar de un exportador a un importador neto de hidrocarburos, advierte el análisis.