Días que marcaron al mundo

Serie de la BBC de Londres, compuesta por 12 dvd

Ericka Montaño Garfias

La historia desde un punto de vista diferente. La serie de documentales Días que marcaron al mundo propone una alternativa para todos los que buscan acercarse al acontecer del mundo a partir de los pequeños detalles:

Un reloj que se detiene en el momento en que una ciudad es destruida. Un automóvil que se estrella en el pilar número 13 de un puente parisino. Prueba de seguridad que provocó el mayor desastre nuclear de la posguerra. El presidente más joven en la historia de Estados Unidos que cae muerto sobre el regazo de su esposa. Un método de construcción novedoso responsable en parte de la caída de las torres más famosas del mundo.

El desciframiento de un lenguaje que permitió reconstruir toda la historia de una civilización, un líder que olvida sus lentes y su discurso en la prisión y que aún así termina con el régimen segregacionista, otro que es asesinado después de recibir la autorización para realizar una marcha no violenta.

Un par de hermanos que durante tres meses desayunaron huevos y jamón antes de realizar el primer vuelo motorizado de la historia, atestiguado sólo por cuatro rescatistas y un niño.

Todos pequeños fragmentos que construyeron la historia del siglo XX, y que ahora La Jornada presenta para sus lectores en la serie Días que marcaron al mundo (Days that shook the World), compuesta por 12 dvd realizados por la BBC de Londres en coproducción con The History Channel. A partir del próximo jueves 28 estará disponible en puestos de periódicos y librerías La Jornada.

Con duración de 50 minutos cada uno, estos 12 dvd cuentan un total de 21 de los días más importantes de la historia, que pueden verse sin necesidad de seguir un orden cronológico: Hiroshima; El asesinato de Kennedy y La dimisión de Nixon; El suicidio de Hitler y el asesinato que inició una guerra; La llegada del hombre a la Luna y El primer vuelo a motor; Descubrimiento de la tumba de Tutankamon y La piedra Rosetta; La caída del Muro y El fin de los zares rusos; La noche de los cristales rotos y El Estado de Israel; La ruptura del átomo y Chernobil; La coronación de Isabel II y La muerte de Diana; El asesinato de Martin Luther King y La liberación de Nelson Mandela; 11 de septiembre y, por último, Guerra en Irak.

Veintiún días que son recreados en dramatizaciones con actores para documentar hechos en los que también se presentan fotografías reales, como aquella única de la detención de Gavrilo Princip tras asesinar al archiduque Francisco Fernando, homicidió que detonó la Primera Guerra Mundial, o la del vuelo de los hermanos Wright en Kitty Hawk. Otras no son fotografías, sino pietaje original de sucesos bien conocidos, como el asesinato del presidente John F. Kennedy, en el que aparece su esposa Jackie recibiendo el féretro de su marido en Washington aún vestida con el traje sastre rosa manchado de sangre, o los atentados del 11 de septiembre de 2001 contra las Torres Gemelas del World Trade Center, en Nueva York.

Es la reconstrucción de los acontecimientos tal y como ocurrieron y, a veces, representan el inicio de un acto y su consecuencia. Así es como se ligan el fin de la época de los zares y con ello el afianzamiento del comunismo en la entonces Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas y la caída del Muro de Berlín, sin un solo muerto, sin un solo herido, que marcó el fin de la guerra fría y se convirtió en el símbolo de la caída del comunismo.

Así, poco a poco se van hilando los capítulos de esta revisión de la historia reciente del mundo, de una forma novedosa: la caída de las Torres Gemelas se narra a partir de los edificios, tratando de dilucidar si los procesos innovadores de construcción y los materiales fueron los responsables del derrumbe. La pregunta es, ¿de haberse construido con los procesos tradicionales en un rascacielos habrían soportado más tiempo en pie para permitir el rescate de todos los que estaban ahí?

El documental va más allá del atentado con los aviones. Se descubre que cada uno de los edificios, diseñados por el arquitecto de origen japonés Minoru Yamasaki, fueron pensados para resistir el impacto de un Boeing 707, que en la época en la que se construyeron (1963) era el avión más grande. Sin embargo nunca se tomó en cuenta el combustible de los aviones, el incendio que sobrevendría después de eso.

Así, quizá habrían resistido los atentados con los aviones 767, pero sin tener en cuenta el combustible derramado, el incendio, los cambios en las protecciones contra conflagración, el daño provocado por las llamas en las escaleras y el debilitamiento del hierro, la suerte estaba echada.

¿Qué es lo que une la coronación de la reina Isabel II de Inglaterra con la muerte de la princesa Diana? La obviedad es que pertenecen a la realeza. Lo oculto es que la coronación de la reina, en 1953, marcó el inicio de una nueva relación entre los medios y la casa real británica.

Fue la primera vez que la BBC realizó una transmisión en vivo durante varias horas, recibieron la prohibición de hacer primeros planos a la nueva reina, veto que se violó durante varios segundos. A partir de ahí los integrantes de la realeza vieron mermado su poder sobre los medios basado en un acuerdo tácito de respeto que tuvo su punto climático con la muerte de Diana, perseguida por paparazzi en el puente del Alma, en París, considerado el más peligroso de la capital francesa para los conductores.

Reconstrucciones de hechos que siguen marcando el imaginario colectivo, el sueño cumplido de llegar a la Luna, de volar, de descubrir los secretos de antiguas civilizaciones.

Uno de estos dvd dedica sus 50 minutos a narrar dos de los sucesos más importantes relacionados con una cultura antigua: la egipcia, con el descubrimiento de la tumba de Tutankamon, intacta, y el desciframiento de la piedra Rosetta, que significó darle un sonido a los jeroglíficos y con ello un significado a cada uno de ellos, un nombre, una fecha, un fragmento de historia. Hasta entonces sólo era un rompecabezas.

Quien descifró la piedra (escrita en griego y las dos escrituras del antiguo Egipto: hierático y jeroglífico) fue Jean François Champollion quien, minutos después de haber logrado su objetivo, cayó desvanecido en el despacho de su hermano sin alcanzar a decir la clave. Pasó cuatro días en cama y al fin pudo dar a conocer su descubrimiento al mundo.

El hallazgo de la tumba de Tutankamon, ocurrido en 1922, en el Valle de los Reyes. Más allá de las leyendas que se han tejido alrededor del suceso, como la maldición que llevó a la muerte a sus descubridores, Howard Carter y lord Carnarvon, presenta la desesperación del primero ante la posibilidad de que Carnarvon dejara de financiar sus exploraciones y cómo, en el último momento, lo que creyó que sería una bodega se reveló como la tumba más rica jamás encontrada hasta entonces, intacta después de 3 mil 245 años.

Durante siete años Howard Carter había hecho exploraciones en la zona del Valle de los Reyes, con el financiamiento de Carnarvon, un apasionado de la cultura egipcia, quien ante la falta de resultados amenazó con retirar su dinero después de cinco campañas de exploración.

El golpe de suerte de Carter ocurrió el 16 de febrero de 1923. Tomó 10 años inventariar y transportar lo que ahí se encontró, entre otras cosas el sarcófago y la máscara mortuoria del joven faraón, que sigue causando admiración en el mundo.

Otros de los documentales sirven para comprender el por qué de situaciones actuales, como el conflicto en Medio Oriente. Tras el Holocausto, en el que murieron 6 millones de judíos, se aprobó la división de Palestina en dos para permitir la creación del Estado de Israel, lo que sucedió el 14 de mayo de 1948, cuando Gran Bretaña se retiró de Palestina, territorio que había mantenido bajo el esquema de protectorado. David Ben-Gurión logró obtener el apoyo de Estados Unidos a la independencia del nuevo Estado, y a partir de entonces la alianza con Washington ha sido permanente, como el conflicto entre palestinos e israelíes.

Para hablar de la guerra en Irak, la BBC reproduce una de las transmisiones de su emisión Panorama, titulado originalmente The case against Saddam, emitido el 23 de septiembre de 2002, un día antes de que el entonces primer ministro británico Tony Blair diera a conocer el informe sobre las armas de destrucción masiva iraquíes, en el que sostuvo que el régimen de Saddam Hussein continuaba fabricando armas químicas y biológicas en su intento por lograr el éxito en la construcción de una bomba atómica. La invasión británico-estadunidense se realizó en marzo de 2003.

Los documentales fueron producidos para la BBC (British Broadcasting Corporation), la cadena de televisión más importante de Gran Bretaña, fundada el 18 de octubre de 1922. Sus transmisiones televisivas comenzaron 14 años después, ya que en sus inicios era una cadena radial privada, estatus que terminó en 1932. Entre el primero de septiembre de 1939 hasta junio de 1946 la BBC suspendió sus transmisiones de televisión, como consecuencia de la Segunda Guerra Mundial.

Su objetivo es “enriquecer la vida de las personas con programas que informen, eduquen y entretengan”, como señala su página de Internet.

Días que marcaron al mundo es comercializada mediante la BBC Worldwide, rama encargada de la venta de programas en todo el planeta, publicación de libros, dvd y otros productos de mercadotecnia.

Desde hace años, la BBC es considerada una de las empresas más serias en el manejo de la información, y sus documentales históricos, científicos o sobre la naturaleza (uno de los más recientes es la película Earth, filmada en alta definición con la tecnología más avanzada) son de los más apreciados en el mundo.