López Obrador está luchando contra un fantasma: Labastida
Senadores de los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y Verde Ecologista de México (PVEM) insistieron ayer en que se requiere de una reforma de carácter “integral” de Petróleos Mexicanos (Pemex) que permita la inversión privada en lo que ya la Constitución y las leyes secundarias lo establecen, como la petroquímica primaria.
El presidente de la Comisión de Energía del Senado de la República, el priísta Francisco Labastida, manifestó en entrevista que “el movimiento civil al que están convocando Andrés Manuel López Obrador y el Partido de la Revolución Democrática es en contra de un fantasma”. Y él mismo se preguntó: “¿Cuál privatización? Yo no he visto ninguna propuesta de alguien que quiera vender Pemex, ni siquiera que digan ‘oigan, vendemos una parte de la empresa, o la petroquímica’. No lo he visto, no lo han planteado”.
Incluso, dijo que “si tuviéramos alguna propuesta en donde se hablara de la privatización, nos sentamos a discutirla y desde luego, nosotros nos opondríamos a la venta de Petróleos Mexicanos y a la modificación constitucional. Lo hemos dicho con toda claridad, nos hemos opuesto a la apertura, inclusive de empresas internacionales en el Golfo de México, excepción hecha de lo que se llama los yacimientos transfronterizos, en donde el efecto popote va a hacernos perder recursos que son del país”.
Por su parte, el senador panista Humberto Andrade aseveró que Pemex necesita una reforma integral que le permita adquirir tecnología de punta para la exploración de aguas profundas en el Golfo de México, e insistió en que el mayor potencial del país en la materia está en aguas profundas, pero su exploración representa costos muy superiores y el empleo de ese tipo de tecnología.
El legislador rechazó que exista un plan secreto para privatizar la paraestatal, pero subrayó que esa empresa “requiere de inversión, importantes cantidades, aunque no necesariamente de capital extranjero”.
A su vez, el senador del Partido Verde Manuel Velasco llamó al gobierno federal a que a través de los conductos necesarios gestione con el gobierno de Estados Unidos “una eficiente y equitativa explotación de los recursos transfronterizos de la zona que ambos comparten en el Golfo de México”.
Recordó que, en 2001, Estados Unidos y México se dividieron el hoyo de dona occidental a través de un acuerdo que concede al país derecho sobre 60 por ciento de los 16 mil 835 kilómetros cuadrados de la zona; dicho convenio tiene como intención resolver los derechos potencialmente lucrativos de la exploración petrolera marina.
Sin embargo, dijo el senador, a pesar de que a México le corresponde la mayor parte del hoyo de dona, esta porción se encuentra a mayor profundidad comparada con la que le corresponde a Estados Unidos. Además, refirió que otro dato importante es que la gran cantidad de proyectos de perforación que se han realizado a la fecha en la parte estadunidense, así como el proceso de licitación, se han llevado a cabo para que las trasnacionales realicen las perforaciones.