El panista González Betancourt impulsa el mejoramiento de equipos y mantenimiento
El Ejército, sujeto a carencias que se subsanan mediante disciplina
Impulsa en San Lázaro un incremento de las ministraciones para las fuerzas armadas
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En imagen de archivo, agentes de la AFI en un operativo antinarcóticos
Foto: Víctor Camacho
El presidente de la Comisión de Defensa de la Cámara de Diputados, general en retiro Justiniano González Betancourt, elaboró un punto de acuerdo para someterlo al pleno con el propósito de exhortar a los gobernadores de los estados y a los titulares de la administración pública federal “a que, en la medida de lo posible, realicen un ahorro monetario de los recursos recibidos del Presupuesto de Egresos de la Federación 2008 para trasladarlos directamente a las fuerzas armadas mexicanas, y que és- tas puedan adquirir nuevos equipos y dar mantenimiento a éstos.
La petición del legislador panista se da en el contexto de la intervención de las fuerzas armadas en el combate contra la delincuencia organizada y el narcotráfico, y ante la obsolescencia del material y equipo de guerra con el que cuentan los militares.
Los argumentos del general se sustentan en “la responsabilidad que tenemos todos nosotros, diputados y diputadas, como congresistas hacia las fuerzas armadas mexicanas. Por tanto, la Comisión de Defensa Nacional acordó que se exhorte a la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública para que acepte un incremento al ramo 7, destinado a la defensa nacional, por un monto de 7 mil 726 millones 146 mil pesos para la adquisición de recursos que mantengan y mejoren las actividades de nuestro instituto armado”.
A decir del panista, en las últimas décadas el Ejército “se ha sostenido merced a las privaciones con gran disciplina y lealtad a México, y han padecido los soldados de la más baja jerarquía”.
Durante 25 años no se ha renovado la flota terrestre, aérea y marítima de las fuerzas armadas; tampoco se ha adquirido armamento moderno, radares y tecnología de punta, y mucho menos se ha cubierto el requerimiento de nuevas plazas de trabajo para el correcto funcionamiento operativo. “Al Ejército Mexicano lo mismo se le llama para atender los efectos de una inundación en Tabasco y Chiapas que para frenar el avance voraz del crimen organizado. Para nadie es desconocido que se tienen que atender estas circunstancias, sobra decirlo, tan graves y dañinas para el pueblo de México, sacrificándolo todo, hasta la propia alimentación mediante un ahorro en sus raciones diarias en casos de desastres.”
El llamado de González Betancourt a los gobiernos estatales y funcionarios federales se circunscribe a aportar recursos para la adquisición de los siguientes materiales de guerra:
Vehículos Humvee, porque los actuales cuentan con 25 años de servicio; radios Falcon de intercomunicación; combustibles, lubricantes y refacciones correspondientes; tres aviones caza 295 para reponer tres naves Hércules C-130 de auxilio a la población; radares de largo alcance necesarios para complementar el sistema de detección y control del espacio aéreo en el sureste del país y fortalecer la soberanía del espacio aéreo nacional; dos helicópteros UH-60L para el combate al narcotráfico; nuevo vestuario y equipo de campaña; incrementar la compensación técnica a los elementos de tropa, y abastecer suficientemente la atención médica de los militares y sus familias.