Primero es necesario un diagnóstico “compartido”
Mouriño: no hay fecha para enviar iniciativa al Congreso
Busca acuerdo de “diversos actores” para analizar reforma
Morelia, Mich., 15 de febrero. El secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño Terrazo, aseguró que el Ejecutivo no presentará una iniciativa de reforma energética hasta que se tenga un diagnóstico, compartido por diversos actores políticos, en el que se vea que “todos estamos hablando de la misma dimensión del problema”.
Advirtió que ante los problemas del sector energético, particularmente el petrolero, el gobierno federal sólo ve tres alternativas de solución: mantener las cosas como están y no hacer nada en cuanto al marco jurídico vigente; resolver sólo la parte económica y destinar recursos del presupuesto –correspondientes a partidas como educación, salud o seguridad pública– a Pemex, o estudiar los modelos que se han usado en otras partes del mundo con el ánimo de fortalecer a la paraestatal, modernizar el sector y permitir que se desarrolle en el futuro.
Mouriño Terrazo asistió como representante del presidente Felipe Calderón a la toma de posesión de Leonel Godoy como gobernador de Michoacán.
El secretario de Gobernación aseguró que los gobiernos que encabeza el PRD a nivel estatal y municipal “no nada más reconocen al gobierno del presidente Calderón, sino que trabajan todos los días con las autoridades federales”.
Ofreció al nuevo gobierno de Michoacán una relación “institucional” y de “absoluta coordinación”, como la que se llevó a cabo con el gobierno de Lázaro Cárdenas Batel.
El secretario de Gobernación dijo que no hay una fecha concreta para presentar una iniciativa de reforma energética al Congreso de la Unión, pues insistió en que antes de eso debe haber un diagnóstico, y una vez que “estemos de acuerdo los diversos actores políticos, entonces tendremos que revisar las alternativas de solución para ese problema que existe en nuestro país respecto del petróleo y en materia energética en su conjunto”.
Reiteró que el Ejecutivo federal tendrá una relación “institucional” con el gobierno de Leonel Godoy Rangel, en la cual haya “absoluta coordinación” para resolver los problemas de los michoacanos, porque éstos “son de suma importancia también para el gobierno federal”.
Luego de que durante la toma de posesión el perredista Gerardo Fernández Noroña le exigió renunciar y lo acusó de ensuciar la Constitución, el secretario de Gobernación se limitó a señalar que su presencia era un acto institucional.