La mafia siciliana, rebasada aquí en ferocidad, señalan
En la sede de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), el ministro en retiro Juan Díaz Romero condenó la “violencia calculada, despiadada y cruelmente efectiva de algún grupo de criminales empedernidos que, por desgracia para México, todos los días dan muestra de una ferocidad que iguala o sobrepasa a la mafia siciliana”, la cual segó la vida del juez federal René Hilario Nieto Contreras.
Al hablar ayer en el contexto de la entrega del Premio Iberoamericano al Mérito Judicial (in memoriam) al juez Nieto Contreras, Díaz Romero criticó también que después de año y medio del crimen, las autoridades encargadas de la investigación (la Procuraduría General de la República) no hayan esclarecido el crimen ni descubierto a los responsables “de este hecho sanguinario”, obra “seguramente” del crimen organizado.
Descartó que sea viable la idea de crear jueces “sin rostro” para que se hagan cargo de los procesos por delincuencia organizada, y externó que aun cuando los juzgadores cubrieran su cara, tarde o temprano se sabría quiénes son.
A su vez, la consejera de la Judicatura Federal Elvia Díaz de León admitió que al menos 25 jueces y magistrados reciben protección policiaca ante el riesgo de ser agredidos por el crimen organizado.
Entrevistada al término de la ceremonia, la consejera precisó: “todos los jueces de Toluca (adscritos al penal de máxima seguridad del Altiplano), de Jalisco (asignados al de Puente Grande) y algunos jueces y magistrados de la zona fronteriza con Estados Unidos (Matamoros, Tamaulipas; Ciudad Juárez, Chihuahua; Tijuana, Baja California; Piedras Negras y Agua Prieta, Coahuila; Nogales, Sonora, y de los estados de Guerrero y Michoacán) son los que reciben seguridad”.
Por su parte, el ministro presidente de la SCJN, Guillermo Ortiz Mayagoitia sostuvo que la muerte del juzgador ocurrió “en medio de acontecimientos que no sólo atentaron contra su persona, sino también contra todos los jueces de México”.