Se piensa en el conflicto armado interno, no en los vecinos, dice el ministro de Defensa
Colombia negocia con Israel la modernización de su flota aérea
El país sudamericano recibirá 13 aviones que fueron dados de baja en Tel Aviv
Seguidores de Uribe reactivan un plan reformista para un tercer periodo de gobierno
Bogotá, 7 de febrero. Colombia reiteró hoy que no tiene planeado aumentar su capacidad militar y que las conversaciones con Israel obedecen a un programa para repotenciar aviones que están quedando obsoletos para actuar en el conflicto armado interno, que afecta al país desde hace cuatro décadas.
“No estamos aumentando la capacidad militar sino repotenciando lo que tenemos para no tener que tirar los aviones como chatarra”, afirmó el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos. Aseguró que Colombia “está pensando en la confrontación interna y nunca en los vecinos”, en una tácita referencia a Venezuela.
El presidente venezolano, Hugo Chávez, ha afirmado recientemente que Estados Unidos tiene planes de atacar a su país con ayuda de Colombia, en el contexto de la tensión que viven las relaciones entre Bogotá y Caracas desde finales del año pasado. Incluso, dijo que Venezuela se mantenía “en alerta” ante cualquier arremetida.
Desde Tel Aviv, Santos declaró a la cadena radial RCN, que las fuerzas militares colombianas realizan operaciones contra la guerrilla cerca de la frontera con Venezuela, pero que no se trata de un movimiento especial “más allá de lo normal”.
El ministro señaló que Colombia destinó el año pasado 165 millones de dólares para modernizar una parte de la flota aérea, y que llegó a un acuerdo con Israel para recibir 13 aviones K-fir dados de baja en ese país y repotenciar otros 11 que Bogotá ya tiene en uso desde hace dos décadas.
El presidente colombiano, Álvaro Uribe, insistió en que el plan de modernización de la flota aérea debe ser entendido como una estrategia para fortalecer a las fuerzas militares en el conflicto armado interno contra grupos armados irregulares.
En tanto, seguidores de Uribe reactivaron un plan para reformar la Constitución y conseguir un tercer periodo del presidente, lo que desató fuertes críticas de sectores políticos de oposición que calificaron la iniciativa de oportunista y exigieron al mandatario pronunciarse al respecto.
El Partido de la U (Unidad Nacional), el principal de la coalición que respalda a Uribe, anunció la víspera que espera reunir cinco millones de firmas para impulsar la reforma.