El médico alemán Borwin Bandelow estudió mil casos, que describió en un libro
Afecta a gente de la farándula el trastorno borderline, dice siquiatra
Narcisismo exacerbado, tendencias autodestructivas, despilfarro, relaciones inestables y terrible miedo al abandono, patrones de conducta
Dedica varias páginas a Michael Jackson
Gotinga, Alemania, 4 de febrero. ¿Por qué muchos de los famosos viven pisando siempre los límites de lo “normal” y lo “anormal”? ¿Por qué la muerte los ronda de manera tan cercana, sobre todo a jóvenes celebridades? ¿Es mera casualidad que a buena cantidad de famosos los persigan escándalos sexuales, depresiones, intentos de suicidio o abuso de drogas? Un afamado neurosiquiatra alemán, al frente del departamento de siquiatría y sicoterapia del Hospital de la Universidad de Gotinga, al norte de Alemania, parece tener la respuesta con base en una investigación realizada con mil casos de famosos.
El doctor Borwin Bandelow, quien publicó su investigación en el libro titulado Celebrieties, vom schwierigen gluck, berühmt zu sein (cuya traducción más acertada podría ser Celebridades: de la difícil y peligrosa felicidad de ser famoso) da la vuelta a la popular creencia de que es el mundo del espectáculo el que trastorna a sus protagonistas; esto es, el experto intenta probar lo contrario. Para él son personas con disposición a ciertos trastornos mentales las que con mayor facilidad llegan a convertirse en famosas ya sea del mundo del espectáculo o en la escena del arte.
Experiencias extremas compensan vacío emocional
En los mil casos de famosos analizados, que no llegaron a cumplir los 35 años y en su mayoría fallecieron por sobredosis de drogas o suicidio, los patrones de conducta eran los mismos: narcisismo exacerbado, impulsividad, tendencias autodestructivas, despilfarro de dinero, relaciones inestables y un terrible miedo al abandono. Las personas que padecen este trastorno tienden a sentir mucho más curiosidad por las drogas, se ven envueltos en escándalos sexuales, poseen una desmedida necesidad de atención y sufren torturantes periodos depresivos; además intentan compensar el vacío emocional con experiencias extremas.
A este cuadro el doctor Bordelow lo llama trastorno borderline (límite), confirmado en todos los sujetos que estudió.
En cada uno de las personas analizadas, el punto máximo de la enfermedad se registra antes de cumplir 30 años. Una vez que se pasa de esa edad, los síntomas empiezan a disminuir, aunque muy lentamente. Se explica que quienes rebasan la línea de los 45 años tendrán mucho más oportunidades de sobrevivir.
El libro cuenta también con interesantes anécdotas de famosos, biografías de Janis Joplin, Jimy Hendrix, Kurt Cobain, Jim Morrison, Brian Jones o Charlie Parker, Ian Curtis (Joy Division) o la estrella punk del grupo Sex Pistols de los años 70, Sid Vicious. Todos fallecieron antes de los 35 años.
Bandelow también analiza en su libro personajes con predisposición a la autodestrucción, como el actor alemán de culto Klaus Kinski (padre de Natascha Kinski), Marilyn Monroe o Billy Holiday. Se ocupa asimismo de casos actuales, como Robbie Williams, Mariah Carey, Whitney Houston y Pete Doherty.
Recientemente Bandelow fue invitado a un programa de televisión para analizar el caso Britney Spears y la británica diva del soul Amy Winehouse, quien por presión de su disquera fue enviada a una clínica de desintoxicación. A sus 24 años cuenta ya con tres fallidos intentos de cura a su dependencia a las drogas.
A Michael Jackson el siquiatra dedica algo más de 10 páginas de su libro. Da cuenta de un ritual la que se sometió el cantante en al isla de Malí, relacionado con prácticas del vudú. Según explica, el músico se dio un baño con la sangre de 42 gallinas para alejar a sus enemigos.
La fascinación que ejercen las celebridades, los problemas y escándalos en que siempre se ven envueltas, de los que la prensa del corazón da cuenta con lujo de detalles, podrán verse con otros ojos después de leer el libro-reporte de Bandelow.
El siquiatra recomienda a las personas comunes y corrientes que se identifican con los trastornos de los famosos buscar una salida o mejora a sus problemas por medio de la creatividad.
De acuerdo con algunos lectores de la obra, parece que no hay que preocuparse si no se ha logrado el sueño de saltar a la fama; eso puede ser un signo de salud mental, dicen.
Borwin Bandelow publicó en 2004 un libro sobre el miedo como trastorno siquiátrico y las maneras de combatirlo, el cual en Alemania se convirtió en bestseller. Ha surgido ya la propuesta de que, después de analizar a celebridades, el especialista se dé a la tarea de ampliar sus investigaciones con estudios de la personalidad de políticos y mangnates.