Alemania bajará 40% emisiones contaminantes
Berlin. 30 de enero. Las consecuencias del cambio climático a escala mundial son responsabilidad ante todo de las sociedades industrializadas. Alemania tiene una política bien definida y clara para la protección del ambiente adquiriendo también compromisos internacionales y negociando asimismo ambién con todos los países para que estos compromisos se lleven a cabo, según declaraciones de Sigmar Gabriel, ministro alemán de Ambiente, Conservación de Recursos Naturales y Seguridad Nuclear.
En conversación con La Jornada, Gabriel puntualizó que el compromiso de Alemania a escala mundial en cuanto al tema del cambio climático está ante todo relacionado con las emisiones de bióxido de carbono, CO2. Alemania se ha fijado como meta reducir esas emisiones hasta en 40 por ciento para el 2020, incluso bajo protesta de los industriales de esa nación que aseguran que el costo de esta medida será la pérdida de miles de empleos.
En Alemania las leyes en cuanto a este tema son muy estrictas. Las fábricas se encuentran permanentemente bajo control y ahora se empieza a exigir a la industria automovilística que los autos sean por lo menos 80 por ciento reciclables.
Una medida que entró en vigor a partir del primero de enero de 2008 –que ahora toca a la capital Berlín, pero que ya se aplicado en otras capitales alemanas como Munich, Stuttgart y Colonia–, es impedir que circulen autos que no se ajusten a las normativas de emisiones de gases contaminantes. Se hace necesario que el auto porte una calcomanía que garantice el buen estado ecológico del vehículo. Se calcula que este sistema afectará a la mayoría de los vehículos con 10 o 12 años de antigüedad.
“Políticas ecológicas requieren de alta tecnología y también recursos no son muchos los países que cuentan con un alto desarrollo en esa materia y nosotros estamos dispuestos a compartir nuestros avances. Es evidente que el desarrollo económico está ligado al tecnológico y esto debe tener como consecuencia el cuidado del ambiente”.
Gabriel refiere también que Alemania tiene acuerdos con otros países para el intercambio científico en materia ambiental, para que ingenieros alemanes realicen una estancia de investigación en países que requieren asesoría en la implementación de tecnologías ecológicas.
“Países como China piden entonces que se invierta en su país con tecnología que no contamine; las negociaciones internacionales para la protección de las selvas deben evitar que cada año se siga eliminando del mapa una superficie que es el equivalente a un país como Suiza”.
Gabriel dice que de cualquier manera se siente optimista en cuanto a los compromisos internacionales para la protección del ambiente, y se refirió a México como “un país que está dispuesto a adquirir compromisos serios para la protección de la biodiversidad, para adoptar medidas que frenen el cambio climático, México es un país que sabe muy bien de las consecuencias de este fenómeno: cada vez se ve más afectado por catástrofes naturales que sobre todo llegan a los más pobres, se han dado cuenta de que reponerse a esas catástrofes cada vez cuesta más y saben que algo tienen que hacer”, apuntó.