Una bandera frente a un imperio es un símbolo de la resistencia de la isla: Granma
Inauguran en La Habana escultura de Niemeyer dedicada al pueblo cubano
La obra del artista fue emplazada frente a la Universidad de las Ciencias Informáticas
A sus 100 años de edad, diseña nueva sede de la embajada de Brasil en esa capital
Ampliar la imagen Un grupo de bailarines danza cerca de la escultura que el arquitecto brasileño Óscar Niemeyer obsequió a Fidel Castro, líder de la revolución cubana, con motivo del 155 aniversario del natalicio de José Martí y de la gesta del prócer por la independencia de Cuba Foto: Reuters
La Habana, 29 de enero. Una escultura en homenaje al pueblo de Cuba, regalo del arquitecto brasileño Óscar Niemeyer (Río de Janeiro, 1907) al líder Fidel Castro, fue situada en la Universidad de las Ciencias Informáticas, en las afueras de La Habana, informaron hoy medios cubanos.
“Niemeyer, incondicional amigo de la revolución cubana, dedicó su obra al heroico pueblo de Cuba en la defensa de su soberanía contra el monstruo imperialista”, de acuerdo con un mensaje leído la noche del lunes en el acto de inauguración, presidido por el ministro de Cultura, Abel Prieto.
Una bandera frente a un imperio, como se titula la obra de Niemeyer, “es un símbolo de la resistencia de nuestro pueblo a las agresiones del imperialismo”, informó el diario oficial Granma.
El monumento está formado por una estructura de 9.5 toneladas, rodeada de agua y especialmente iluminada, construida con tubos de acero pintado de rojo, representa a un monstruo con la boca abierta frente a un pequeño hombre empuñando la bandera cubana.
El teólogo brasileño Frei Betto dijo durante el acto, en el cual también estuvo Carlos Eduardo Niemeyer (Kadú), nieto del reconocido arquitecto, que la única razón para que Óscar Niemeyer –quien recientemente cumplió 100 años de edad– no estuviese presente en la inauguración “es su fobia a volar”.
Nuevos proyectos del arquitecto
Por su parte, el ministro Abel Prieto calificó de “revolucionario” el carácter que siempre ha tenido el artista brasileño, al recordar la amistad de Óscar Niemeyer con Fidel Castro, quien le ha enviado en los meses recientes cartas e incluso lo ha mencionado en alguna de sus “reflexiones”.
El artista, quien ingresó al Partido Comunista de Brasil en 1945, ha comenzado trabajos para diseñar un teatro, una casa multimedia, una nueva sede de la embajada de Brasil en Cuba, y proyecta crear una filial de su fundación en La Habana.
La escultura de Niemeyer fue colocada en la plaza que lleva el nombre del artista, en la capital de la isla, cuya superficie es de 20 mil metros cuadrados, tiene forma de elipse y capacidad para 13 mil 500 personas.
“Niemeyer, incondicional amigo de la revolución cubana, siempre anheló hacer un homenaje personal al pueblo cubano y ese anhelo se concreta con la donación del proyecto de esta plaza, así como con la proyección gratuita de otros edificios para esta institución”, señaló Melchor Gil, rector de la Universidad de las Ciencias Informáticas.