Empieza la construcción de viviendas “de emergencia”, hechas de madera, con apoyo de ONG
Mil 404 damnificados tabasqueños ignoran cuándo dejarán el albergue
Advierte el gobernador que el miércoles dejarán de entregarse despensas a familias afectadas
Sigue buscando terrenos para reubicar a quienes perdieron sus casas o viven en zonas de riesgo
Ampliar la imagen Más de un millar de damnificados de las inundaciones de octubre y noviembre pasados en Villahermosa permanecen en el único refugio que queda en esa ciudad, en espera de que las autoridades encuentren un lugar para reubicarlos Foto: René Alberto López
Villahermosa, Tab., 26 de enero. De los mil 433 albergues instalados luego de las inundaciones de octubre y noviembre pasados, donde fueron atendidas 153 mil 567 personas de más de un millón 200 mil que resultaron afectadas en 780 comunidades y colonias de los 17 municipios tabasqueños, hoy sólo queda un “refugio temporal” ubicado en el centro recreativo de la colonia Atasta, en esta capital. En ese lugar se concentraron desde diciembre mil 404 damnificados.
Son aquellas familias que perdieron todo y esperan ser reubicadas por el gobierno del estado en nuevas viviendas.
La familia de Romana Gerónimo Solís, integrada por su padre, de 69 años; su esposo, de oficio albañil, y sus dos hijos, de seis y siete años, son parte del grupo de damnificados que desde noviembre no han podido regresar a sus casas porque el río las arrastró y dejó “sólo dos horcones”. Romana y sus familiares vivían en el sector Armenia de la colonia Las Gaviotas, la más dañada por los anegamientos.
La mujer narra que las autoridades permitieron a sus hijos y a los de otros damnificados tomar clases en la escuela primaria Benito Juárez, cerca del refugio.
Baldemar Hernández Reyes, un discapacitado que vivía en la colonia Manga 2 y que vende cigarros, se queja de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) porque pese a tener la ficha H-41919 no le han entregado su vale de 10 mil pesos para reponer los enseres domésticos que perdió en las inundaciones.
Algunos damnificados agradecen la ayuda del gobierno, pero otros ya están hartos de vivir en un refugio.
Las autoridades del DIF Tabasco reconocen que no saben cuándo podrán cerrarlo. El administrador del sitio, Raúl Morales Martínez, informó que ya se puso en marcha un plan integral de salud, alfabetización y actividades recreativas para las familias afectadas.
Explicó que en esas instalaciones, donde permanecen 425 mujeres, 379 hombres, 287 niños y 313 niñas, conviven personas de distintas religiones.
Raúl Morales aseguró que a este albergue sigue llegando apoyo de diversas instituciones, entre ellas la Sedeso, el DIF y Diconsa, que abastece alimentos.
Rúrico Domínguez Mayo, director de Protección Civil, aseveró que la mayoría de las casas de los damnificados estaban hechas de maderas y láminas, y sólo algunas tenían muros de ladrillo.
Dijo que el gobierno estatal busca terrenos para construir unas 3 mil viviendas a fin de reubicar a los damnificados y a familias que viven en zonas de riesgo.
Los afectados dicen que se han enterado de estos planes por los medios de comunicación, pues las autoridades no les han informado dónde se construirán las casas ni cuándo estarán terminadas.
Los habitantes del último de los refugios proceden de las comunidades y colonias Las Gaviotas, La Manga, Sector Armenia, Coquitos, Monal, Sector Compuerta, Tierra Colorada, Casa Blanca 2, Sector Periférico, Valle Verde, Cedral e Ixtacomitán, todas del municipio de Centro, donde se ubica Villahermosa, y perdieron sus viviendas por el desbordamiento de los ríos Grijalva y Carrizal.
El 24 de enero el gobernador Andrés Granier Melo encabezó un acto en el cual se anunció la construcción de mil viviendas de emergencia para las familias damnificadas.
Los trabajos, explicó, se realizarán en los próximos seis meses con apoyo de la agrupación chilena Un techo para mi país, con la participación de jóvenes universitarios de Costa Rica y El Salvador, así como del Distrito Federal, Querétaro y Tabasco.
El sábado pasado se inició la construcción de las primeras 150 viviendas de madera en las comunidades Miguel Hidalgo y Asunción Castellanos, municipio de Centro, así como en las localidades de Raya de Zaragoza, Vicente Guerrero y Francisco I. Madero, municipio de Tacotalpa. Se espera que estén terminadas antes del primero de febrero.
El Ejecutivo local también advirtió que el 30 de enero dejarán de repartirse despensas a familias de las colonias y comunidades afectadas.