El disco Cuartetos Mexicanos, aportación histórica del ensamble Anacrúsax
Desdén por el saxofón en el mundo sinfónico, dice el músico Jorge Córdova
El álbum inaugura la serie Saxofón Contemporáneo de México
Ampliar la imagen El Cuarteto Anacrúsax, en la sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes Foto: Jesús Villaseca
El influjo y arrastre de que goza el saxofón en diferentes ámbitos lo han consolidado como uno de los instrumentos con mayor poder de atracción y fascinación hoy día.
“Tiene un sonido que a todos convence de su maravilla, seductor, desde muy agresivo hasta muy delicado”, sostiene el compositor Jorge Córdova, quien señala que, no obstante esas cualidades, el saxofón no ha logrado ser valorado del todo en el espacio de la música de concierto.
“Casi todo mundo lo ubica en el jazz –John Coltrane es una presencia imborrable–, en la música norteña, en bandas militares y, por último, en la música de concierto”, indica.
“Como siempre pasa con las innovaciones, los puristas no lo permitieron, se tardó un buen tiempo en ingresar, desde su construcción (en 1846) hasta que (Maurice) Ravel lo incluye en el Bolero. No hay plazas para saxofonistas en las sinfónicas, se le ha desdeñado.
“A partir de Ravel, grandes compositores, como (Claude) Debussy y (Heitor) Villa-Lobos han escrito conciertos bellísimos y le han dado el lugar que merece”.
Las anteriores consideraciones de Córdova tuvieron lugar durante la presentación del disco compacto Cuartetos mexicanos de saxofón, efectuada la noche del martes en la sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, cuyo aforo resultó insuficiente para la cantidad de asistentes.
Este material, enfatizó, representa una aportación histórica que el Cuarteto Anacrúsax hace a la música de concierto en México, al ser la primera grabación que se realiza en el país con obra para ese tipo de dotación.
Lo integran sendas piezas de ocho compositores de diferentes generaciones, si bien predominan los jóvenes, entre ellos se encuentran Jorge Calleja, Ananda Macías, Ernesto Anaya y Enrico Chapela. Las partituras, en tanto, son inéditas, a excepción de la atractiva versión que se ofrece de Huapango, de José Pablo Moncayo.
Otro valor intrínseco de este álbum es que con él se inaugura la serie Saxofón Contemporáneo de México, mediante la cual la disquera Urtext ofrecerá este año un conjunto de producciones discográficas conformadas con obra mexicana para saxofón, en sus diversas combinaciones instrumentales.
“Es un minimalismo mexicano, ya que en casi todas las obras hay una presencia del minimalismo, como una referencia a nuestro siglo”, describió Jorge Córdova a propósito del material de Anacrúsax.
Antecedido en la palabra por el también compositor Ernesto Anaya y por Omar López, integrante del cuarteto, entre algunos de los aspectos que abordó Córdova destaca que en la actualidad se habla mucho del saxofón, pero poco se le conoce.
Recordó que fue construido en 1846 por el laudero francés Adolphe Sax, quien tardó 20 años en obtener la patente y, por más esfuerzos que hizo, no logró que se le incluyera dentro de las orquestas sinfónicas, incluso fue desdeñado por su gran amigo, el compositor Hector Berlioz.
Se refirió también a la complejidad que existe en el momento de clasificar a este instrumento y no saber si ubicarlo en la sección de metales o maderas, caso similar al de la flauta transversa.