Los recursos económicos siempre son necesarios e insuficientes: Carlos Arámburo
“El desarrollo nacional, sólo con mayor apoyo a ciencia y tecnología”
La UNAM, principal generadora de conocimiento, “debe seguir liderando la lucha por más presupuesto”
La relación entre universidades y sector productivo “debe ser bilateral”
Ampliar la imagen Es necesario que la sociedad conozca mejor el trabajo universitario, afirmó Carlos Arámburo, coordinador de Investigación Científica de la UNAM, en entrevista con este diario Foto: Guillermo Sologuren
El coordinador de Investigación Científica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Carlos Arámburo de la Hoz, es contundente al afirmar que México debe estar consciente de que la única manera de afrontar sus necesidades y de desarrollarse es mediante la generación de recursos humanos capacitados y un mayor mayor apoyo a la educación, la ciencia y la tecnología.
En entrevista con este diario, advierte que los fondos económicos en la materia “siempre son necesarios e insuficientes”, y recuerda que los poderes Ejecutivo y Legislativo, federales y locales, “tienen un compromiso para destinarles los montos necesarios e indispensables a esas áreas”.
El sector productivo, señala, “tiene que voltear hacia la investigación científica y a las universidades públicas para encontrar los apoyos requeridos”, aunque subraya que la relación tiene que ser “bilateral”, pues los investigadores también deben propiciar ese acercamiento.
Arámburo considera de vital importancia generar un mayor vínculo entre la investigación científica y la de humanidades, porque “la universidad no debe dejar su esencia como generadora de conocimiento original y, mediante éste, tratar de avanzar en la solución de algunos problemas”. Anota que la labor de difusión y divulgación de los avances tanto en ciencia como en tecnología corresponde a los especialistas: “debe ser parte de nuestra actividad cotidiana y no sólo una tarea de fin de semana”.
Desde su labor como funcionario, identifica como los principales temas a resolver: el envejecimiento de los investigadores; otorgar más facilidades para que los jóvenes se incorporen a las actividades científicas; la falta de apoyos económicos; la creación de una política adecuada de difusión para que los alcances y logros se transmitan a la ciudadanía, así como impulsar la descentralización de la investigación en México.
–¿Cuál es la perspectiva para los siguientes cuatro años de la investigación científica en la UNAM?
–Está en una buena plataforma. Estamos integrados por 29 entidades: 19 institutos y 10 centros de investigación repartidos entre la zona metropolitana y diversos puntos del país. Me parece que hay áreas muy tradicionales, con una gran historia, que han hecho contribuciones muy importantes, y otras nuevas. Lo que se intentará es consolidar el equilibro entre ellas para que continúen su desarrollo y se consoliden en distintos rubros.
Contacto académico
–¿Trabajará en coordinación con las áreas de las humanidades?
–Ha habido ya intentos interesantes entre ambos subsistemas para tratar de encontrar mayores puntos de contacto. Promoveré un mayor acercamiento con la Coordinación de Humanidades, para buscar algunos proyectos de confluencia entre distintas áreas y que ello redunde en beneficio de nuestro país. Debemos encontrar un equilibrio entre la consolidación y generación de conocimiento original, ciencia básica, formación de recursos humanos de alto nivel y, a su vez, en aquellas áreas de oportunidad donde exista una mayor y mejor inserción con los problemas sociales.
–¿Esas relaciones se extienden hacia el sector productivo?
–Hay que admitir que éste es un problema importante en México, aunque en años recientes se ha buscado un mayor acercamiento. El sector productivo –entendido como el público y el privado–, tiene que voltear también hacia las universidades para encontrar los apoyos que requiere.
–¿Cómo se puede propiciar ese acercamiento?
–Es una cuestión de ida y vuelta, una relación bilateral y tenemos que hacer esfuerzos en ese sentido. Los científicos debemos aprender a comunicar de mejor manera nuestro conocimiento, infraestructura, capacidades y los avances que hemos desarrollado. Por otra parte, la industria tiene que hacer visibles sus requerimientos específicos.
–En el Presupuesto de Egresos de la Federación hubo un incremento para la ciencia y la tecnología, ¿es suficiente?
–Los recursos siempre son necesarios y siempre son insuficientes. Este país requiere tener conciencia clara de que es con la formación de recursos humanos y el apoyo a la educación, la ciencia y la tecnología, como podremos afrontar mejor nuestras necesidades.
“Por supuesto que es insuficiente este aumento –asegura–, estamos cerca de 0.4 por ciento del Producto Interno Bruto, lejos de la normativa internacional que establece que para esas áreas, por lo menos, debe destinarse uno por ciento, cifra de la que estamos muy lejos.
“Tiene que haber una serie de acuerdos nacionales para que ese objetivo se cumpla. Necesitamos recursos para fortalecer los laboratorios y las entidades; para crear plazas a nuevos investigadores en la UNAM –que hace la mayor parte de la investigación del país– y también para el resto de las universidades públicas. Por ello será muy importante que nuestra universidad continúe liderando esa lucha.”
–¿Cuáles son los principales problemas en la investigación científica de la UNAM?
–Uno es que nuestra plantilla de investigadores está envejeciendo. Necesitamos renovar los cuadros de especialistas; se requieren plazas nuevas para incorporar a los estudiantes que estamos formando en los programas de posgrado y a los que han salido del país a hacer estancias posdoctorales y que requieren regresar. La otra tiene que ver con los recursos para la operación cotidiana de los proyectos. Debemos agregar a más jóvenes a los posgrados, y para lograrlo es muy importante contar con un plan fuerte de becas, de manera que ellos se formen y atiendan las diversas líneas de investigación.
“Necesitamos también una política de difusión y divulgación de la ciencia, de manera que la sociedad en su conjunto pueda tener una mejor percepción del trabajo que hacemos los científicos, de su valía y de su importancia para el país. Además, se tiene que promover la descentralización de la investigación y de los recursos humanos. La mayor parte de la investigación se ha realizado en la zona metropolitana de la ciudad de México y en algunas cuantas áreas del país, pero será muy importante que ubiquemos a diferentes cuadros profesionales en otras regiones”, finalizó el funcionario.