Pronto, los daños al ambiente serán “irreversibles”
En el siglo anterior, especialmente en las pasadas tres décadas, se ha dañado el medio ambiente más que a lo largo de la historia de la humanidad, al grado de que si no se emprenden cambios en el modo de vida, sobre todo en el de consumo, en 10 años comenzarán a ocurrir deterioros irreversibles, advirtieron ecologistas en el contexto del cuarto día de labores del Foro Social Mundial (FSM) 2008.
Durante su participación en la mesa Alternativas en la defensa de la naturaleza, qué hacer frente al desastre ecológico mundial, los expertos afirmaron –“sin exagerar”– que si no se da un golpe de timón en la aplicación del modelo económico imperante y las cosas siguen como van, la humanidad podría desaparecer en este siglo, porque en los hechos se está “suicidando”.
Víctor Toledo, premio nacional de Ecología 1995, indicó que en los pasados 30 años de neoliberalismo se ha agravado la situación ambiental, al punto de que la preocupación es tan alta que debemos controlarla para que no se vuelva angustia”.
Según el ambientalista, “hemos pasado de los focos amarillos a los primeros focos rojos de emergencia, los cuales indican que el planeta se está calentando”. Citó como ejemplo de los acontecimientos que nos anuncian el cambio climático los incendios ocurridos en diversas partes del mundo en 1998, las altas temperaturas registradas en Europa en el verano de 2003 y los potentes huracanes de 2005, entre ellos Katrina.
Apuntó que “año con año las cosas se agudizan, y cada vez estamos más convencidos de que la crisis ambiental es una crisis de la civilización industrial y de un consiguiente problema social”.
Esclavos de la tecnología
Antes, Carlos Padilla Massieu lamentó que ante lo evidente “se siga privilegiando el automóvil, saturando las ciudades y haciéndolas esclavas de la tecnología, que cada vez consume más energía no renovable, y sabiendo que pronto va a ser más escasa, se sigue facilitando la producción, sin cargar los costos ambientales a los transformadores de energía no renovable”, entre muchos otros.
Comentó que se fomenta la productividad a costa del ambiente, y que “por mucho que mediante campañas mediáticas se quiera hacer creer que hay industrias verdes, sólo se visten de ese color, porque en realidad la industria jamás se llevará con la ecología”. Agregó que el problema ambiental es sobre todo “ético”, al que hay que dar solución mediante un cambio de conciencia.
Indicó que si las autoridades y la población en general hicieran por el ambiente sólo lo que está escrito en los prólogos de los libros que abordan el tema ecológico, la salud del planeta estaría en recuperación, pero lamentó que no sea así.
Por su parte, Miguel Valencia, integrante de Ecomunidades, insistió en que no es cuento ni pesimismo decir que la humanidad puede desaparecer en este siglo, debido a que se exacerba el consumismo, la violencia, la depredación; en suma –advirtió–, el hombre puede desaparecer a consecuencia de los “peligros creados por las modernas tecnologías, por el calentamiento global y por la globalización del desastre ecológico”.