La economía estadunidense es resistente y saludable, afirmó Condoleezza Rice en Davos
Crisis en Estados Unidos afectará especialmente a México: Ortiz
Se realineará la economía mundial, lo cual pondrá fin a una era, advirtió George Soros
El gurú financiero afirmó que la intervención de las autoridades impidió colapso de mercados
Ampliar la imagen George Soros antes de participar en un seminario del Foro Económico Mundial en Davos Foto: Ap
Davos, Suiza, 23 de enero. La crisis financiera en Estados Unidos “afectará especialmente” a México, afirmó este miércoles el gobernador del banco central de ese país, Guillermo Ortiz Martínez.
Hasta hace pocos días, el contagio de la crisis financiera estadunidense a la economía mexicana había sido limitado, declaró Ortiz Martínez. Pero, añadió, “esto ha cambiado en los últimos días y el contagio financiero se está viendo más claramente”.
El gobernador del banco central mexicano hizo las declaraciones en el marco de la edición 2008 del Foro Económico Mundial, un acto que cada año reúne en este retiro alpino a la elite de las finanzas y el medio empresarial, así como a representantes del sector público.
En un foro dominado por la preocupación de que la crisis financiera de Estados Unidos se traslade a la actividad productiva, el funcionario mexicano llamó la atención sobre las consecuencias en Latinoamérica y en particular en México. La crisis financiera en Estados Unidos que ha contagiado en los últimos días a América Latina afectará especialmente a México por su cercanía y volumen comercial con su vecino del norte, expuso Ortiz Martínez, citado por Reuters.
“Para toda América Latina esto tiene implicaciones. Para México, obviamente estamos más cerca, tenemos un comercio mayor con Estados Unidos, así que el tema de la parte real (producción y empleo) en México es más pronunciado que en el resto de América Latina”, agregó Ortiz.
El martes pasado, el presidente mexicano Felipe Calderón dijo, en referencia a la crisis en Estados Unidos, que México enfrentará y superará la adversidad porque “estamos poniendo motores” a la economía. En cambio, Ortiz dijo hoy aquí que en los últimos días se ha registrado un “contagio más evidente” de los problemas financieros de Estados Unidos hacia México.
El 40 por ciento del producto interno bruto (PIB) de México depende de Estados Unidos, de acuerdo con Reuters. El martes pasado, Merrill Lynch, una de las mas influyentes firmas de Wall Street, redujo de 1.6 a 0.8 por ciento su pronóstico de crecimiento de la economía de Estados Unidos para 2008. El Banco de México anunció el viernes pasado que ajustará a la baja su proyección de crecimiento del PIB mexicano en 2008, que ahora ubica en torno a 3.2 por ciento, medio punto menos del registrado en 2007.
Mientras en los trabajos y pasillos del Foro Económico Mundial prevalece la idea de que se avecinan tiempos complicados, la secretaria de Estado estadunidense, Condoleezza Rice, participante en el acto, declaró que “la economía estadunidense es resistente y saludable, y sus fundamentos económicos de largo plazo son saludables. Estados Unidos sigue dando la bienvenida a la inversión extranjera y al comercio libre. Y nuestra economía seguirá siendo un motor líder del crecimiento económico global”. Después de un día de especulaciones sobre la intensidad, duración y posible impacto de una recesión estadunidense, la funcionaria hizo una fuerte defensa de la economía de su país y agregó que el mundo debería confiar en la fuerza subyacente de la economía global, refirió Dpa.
Rice mencionó las medidas anunciadas por el presidente George W. Bush como “un paquete de crecimiento fiscal significativo que acelerará el gasto de los consumidores y dará apoyo a las inversiones de negocios este año”.
Menos optimista, el multimillonario húngaro-estadunidense George Soros anticipó, también en un debate en el foro de Davos, que la crisis por la que atraviesa la economía de Estados Unidos traerá el fin del dólar como divisa de reserva en el mundo.
El gurú de los mayores inversionistas del planeta, el único hombre que ha hecho temblar a algunos bancos centrales, George Soros, el multimillonario que ha incrementado su fortuna con la especulación financiera, advirtió que la crisis financiera generará una realineación de la economía global, la cual pondrá fin a una era, según consigna El Semanario en su versión on line.
“La peor crisis del mercado en 60 años”, titula una columna publicada por el gurú Soros en el influyente diario británico Financial Times.
El artículo escrito por el inversionista se publica a unos días que declaró al diario austriaco Daily Standard que “la situación es mucho más seria que cualquier otra crisis financiera desde finales de la Segunda Guerra Mundial”.
Ahora en el Financial Times señala: “la crisis actual marcará el fin de la era expansionista del crédito basado en el dólar como divisa internacional de reserva (…), es la culminación del súper boom que ha durado más de 60 años”.
El húngaro-estadunidense que ganó más de mil millones de dólares en 1992, cuando apostó a la devaluación de la libra e hizo temblar al Bank of England cuando su previsión se cumplió, señaló que la burbuja hipotecaria que desató la crisis en Estados Unidos es uno de los casos más complicados de los ciclos económicos de los últimos 60 años.
El inversionista que también salió bien librado con millones de dólares en la cartera cuando especuló con la crisis de Rusia en 1998, señala que el crédito juega un papel relevante en los ciclos económicos
Dijo que la facilidad de crédito genera la demanda que empuja el valor de la propiedad, que a su vez aumenta la cantidad de crédito disponible.
Cuando la expansión del crédito enfrentó problemas, las autoridades financieras intervinieron inyectando liquidez o con otras formas para estimular la economía, lo cual generó un sistema de incentivos asimétricos, que impulso siempre el crecimiento de los préstamos.
Esa dinámica, dice Soros, fue lo que llevó al extinto ex presidente estadunidense Ronald Reagan (1981-1989) a denominar como la “magia del mercado” “y yo llamo fundamentalismo de mercado”.
Los fundamentalistas de mercado, dice el magnate de 77 años, creen que los mercados financieros actúan o se mueven al equilibrio y al interés común.
“Este es un error conceptual obvio, porque fue la intervención de las autoridades lo que impidió que los mercados financieros colapsaran, no los propios mercados”, señala en el artículo Soros, que nació en 1930 en Budapest bajo el cobijo de una familia judía y a los 17 años de edad se mudó a Londres, antes de viajar a Nueva York donde empezó a trabajar como broker en una intermediaria financiera.
Ese fundamentalismo fue el eje rector en 1980 cuando los mercados financieros iniciaron su globalización y Estados Unidos empezó a abultar su déficit en cuenta corriente, el cual en 2006 alcanzó el 6.2 por ciento del PIB de ese país.
Globalizados los mercados financieros se orilló a los consumidores al mercado crediticio, el cual fue desarrollando nuevos instrumentos, cada vez más sofisticados; sin embargo, ese boom se salió de las manos cuando las propias autoridades no lograron calcular el riesgo y permitieron que la administración del riesgo estuviera en manos de los bancos e incluso la tarea de las calificadores de riesgo estuvo en manos de la información que proporcionan los propios autores de los productos sintéticos.
“Todo lo que podía salir mal, salió mal”, señala.
Lo que empezó con las hipotecas de alto riesgo se difundió a todas las obligaciones de deuda con garantía. Puso en peligro a las compañías de seguro e hipotecarias y amenazó con desenmarañar el multimillonario mercado de cobertura por riesgos crediticios. Los compromisos de los bancos de inversión con las compras apalancadas se volvieron pasivos. Los fondos de inversión que operan en cualquier mercado terminaron participando sólo en algunos y tuvieron que ser compensados.
El mercado de títulos de renta fija respaldados por activos se paralizó y los vehículos especiales de inversión creados por los bancos para el negocio hipotecario, el cual estaba fuera de su balance financiero, ya no podía quedar al margen del financiamiento.
El golpe final se produjo cuando los préstamos interbancarios, que son el corazón del sistema financiero, se desestabilizaron porque los bancos tuvieron que economizar recursos y ya no podían confiar en sus contrapartes.