Se cumplen 35 años de decisión de la Suprema Corte

Participan miles en “marcha por la vida” en Washington

Afp

Washington, 22 de enero. Miles de personas llegadas de todo Estados Unidos se manifestaron el martes en Washington en una “marcha por la vida” organizada en el 35 aniversario de la decisión de la Suprema Corte estadunidense que dio pie a la autorización del aborto.

El 22 de enero de 1973, en su decisión Roe contra Wade, la Corte estimó que el derecho a la vida privada permitía interrumpir un embarazo mientras el feto no fuera viable. Desde entonces los opositores al aborto se movilizan cada año en esta fecha para intentar obtener la anulación de esa decisión.

Bajo un cielo gris y algunas gotas de fría lluvia, los manifestantes se reunieron al final de la mañana en la explanada que se extiende frente al Capitolio, sede del Congreso en Washington.

Tras cantar el himno estadunidense con fervor y rezar por las mujeres que abortan, los militantes escucharon una intervención del presidente George W. Bush, grabada algunas horas antes en la Casa Blanca.

“Ustedes están aquí porque saben que toda vida merece ser protegida. Y cuando inician su marcha, estoy orgulloso de estar a su lado”, declaró Bush, aplaudido por la multitud.

“Más de uno de cada cinco embarazos termina en aborto. ¡Estados Unidos vale más que eso! Vamos a seguir trabajando por una cultura de vida”, insistió, añadiendo: “No hemos terminado, pero hemos progresado”.

Los manifestantes, que hicieron luego una última escala frente a la Suprema Corte, exhibieron pocas imágenes de fetos abortados, algo que hasta ahora era habitual para el movimiento estadunidense anti aborto. En cambio, fueron remplazadas por dibujos más sobrios de fetos con una corona de espinas, fotos de bebés mofletudos proclamando “No nos tapemos la cara, el aborto mata”, o pancartas en memoria de los 40 a 50 millones de “bebés que faltan” desde hace 35 años.

Aunque algunos de los manifestantes han participado en la casi totalidad de las “marchas por la vida”, muchos no habían nacido todavía en 1973. Marchando junto a miembros de su parroquia, su universidad, su grupo de scouts u otros, los jóvenes “sobrevivientes del aborto” eran de lejos los más numerosos.

“Estoy superemocionada y quiero realmente frenar el aborto”, explicó María Willig, de 12 años, llegada desde Cincinnati, junto a miembros de su parroquia, sus padres y algunos de sus siete hermanos y hermanas.

“Tenemos una clínica de abortos en Cincinnati, entonces uno de cada dos sábados desfilamos y rezamos por la clínica, rezamos el rosario”, contó esta pequeña rubia, mientras entregaba libretas de oraciones.

Entre los laicos, pancartas de “Ron Paul presidente” se veían diseminadas en la multitud, y sus militantes repartieron folletos explicativos del compromiso antiaborto de este ex ginecólogo convertido en el más atípico aspirante a la candidatura republicana para la elección presidencial de noviembre.

Justo antes de la manifestación, el candidato recibió el apoyo de Norma McCorvey, la mujer cuya solicitud de aborto bajo el seudónimo de Jane Roe sentó precedente en 1973 en Estados Unidos. Convertida al catolicismo en los años 90, actualmente lucha por hacer anular esa decisión.

En Misuri, una corte federal de apelaciones eligió este martes para ordenar a las autoridades penitenciarias locales suspender su política de negarse a llevar a las presas que quieren abortar a clínicas especializadas.