España: ofensiva contra dos partidos nacionalistas vascos
Madrid, 22 de enero. El juez Baltasar Garzón, de la Audiencia Nacional española, dio hoy el primer paso en el proceso de ilegalización de dos partidos de la izquierda nacionalista vasca, considerados “sucesores” de Batasuna, coalición sancionada por Madrid al considerarla brazo político de ETA.
Tras recibir de las fuerzas de seguridad del Estado dos informes de casi 2 mil 500 páginas que recopilan pruebas de la presunta vinculación de Acción Nacionalista Vasca (ANV) y del Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV) con Batasuna y ETA, el juez convocó hoy a sus representantes para los próximos 4 y 5 de febrero.
Ahí Garzón les comunicará que se iniciará la suspensión de actividades de los dos partidos políticos, y que impedirá a ambas formaciones presentarse a las elecciones generales del 9 de marzo.
La mitad de las listas de ANV, para la que Batasuna pidió el voto en mayo, fueron ilegalizadas antes de los comicios municipales de ese mes, cuando ese partido político sin relevancia fue reactivado, supuestamente para permitir concurrir al entorno etarra en esas elecciones. Desde entonces, el gobierno del socialista José Luis Rodríguez Zapatero y la justicia recopilan datos y pruebas para su ilegalización.
Ni ANV ni el PCTV condenaron ninguno de los atentados perpetrados por ETA, entre ellos los dos últimos con víctimas mortales: el que acabó el primero de diciembre con la vida de dos guardias civiles en el sur de Francia y el que el 30 de diciembre de 2006 causó la muerte a dos ecuatorianos en el aeropuerto de Madrid.
Asimismo, el tribunal supremo español condenó al ex presidente del Parlamento vasco Juan María Atutxa al pago de una multa y una pena de inhabilitación por no haber disuelto un grupo parlamentario próximo a ETA en 2003.
Por mayoría relativa de sus miembros, el tribunal condenó bajo los mismos argumentos y con los mismos castigos no sólo a Atutxa, del Partido Nacionalista Vasco (gobernante), sino también al vicepresidente Gorka Knorr y a la secretaria segunda de este Parlamento, Kontxi Bilbao, por “desobediencia a la autoridad judicial”.
La asociación Manos Limpias acusó a estos tres directivos en 2003 de haberse negado a disolver Sozialista Abertzaleak, considerada una organización pantalla de Batasuna, tras su ilegalización.