La clínica se ubica en las márgenes del río Coatán, zona considerada de alto riesgo

Persisten afectaciones en nosocomio del IMSS en Tapachula, a dos años de Stan

Las obras de remodelación o reubicación siguen sin concretarse por apatía de autoridades

Rodolfo Villalba Sánchez (Corresponsal)

Tapachula, Chis., 21 de enero. A pesar de encontrarse en las márgenes del río Coatán –a 10 metros de la zona de extremo riesgo delimitada por la Comisión Nacional del Agua (Conagua)– y de los graves daños que le provocó el huracán Stan, las autoridades del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ya contemplan inversiones millonarias para remodelar el principal centro médico de los chiapanecos de las regiones Costa y Frontera.

En octubre de 2005, Stan puso en evidencia el riesgo en el que se encuentran el personal y los cientos de usuarios de la clínica, que en ese entonces perdió varios edificios y otros resultaron dañados, al igual que la planta tratadora de aguas negras.

Sin embargo, dos años y tres meses después de la devastación que dejó aquí el meteoro, hasta ahora no se ha realizado ninguna obra para, en caso necesario, salvaguardar la vida de las personas que a diario se encuentran en esas instalaciones, incluso luego de que el año pasado un frente frío ocasionó inundaciones en el sótano.

La alerta es permanente en esta zona considerada de alto riesgo, reconoció el titular de Protección Civil en Tapachula, Herbert Shroeder Bejarano, “a pesar de que no se encuentra dentro de la línea magenta que hizo la Conagua, pero sí está dentro de la zona inundable, en el mapa de riesgo que delimitó la misma dependencia”.

Pese a no ser competencia total de Protección Civil municipal la posible reubicación de la clínica, el funcionario afirmó que se debe tender un vínculo de comunicación entre la Federación, el estado y el municipio y analizar las correspondientes recomendaciones al IMSS, para no verse afectados nuevamente.

Shroeder indicó que en una eventual emergencia evacuar el nosocomio resultaría una labor “titánica”; agregó que diversas colonias que se ubican a espaldas de la clínica también se encuentran en riesgo, pero ahí, aclaró, los propios habitantes se niegan a ser reubicados.

En diciembre pasado, el delegado estatal del IMSS, Samuel Orrico Torres, informó que el gobierno federal había ordenado la demolición de gran parte de las instalaciones del nosocomio, y al mismo tiempo aprobado una serie de construcciones y rehabilitaciones en el inmueble.

Precisó que entre las obras a realizar se encontraba un muro de contención para frenar las aguas del río Coatán, una cisterna y la rehabilitación de la planta de tratamiento de aguas negras, entre otros proyectos.