Hace falta un plan estratégico para el campo, señalan
Posible negociar capítulo agrario, si hay voluntad política: obispos
El capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) se podrá renegociar si hay voluntad política del gobierno federal, señaló la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), en respuesta al señalamiento del secretario de Agricultura, Alberto Cárdenas, de que el acuerdo comercial ya no se puede abrir.
El secretario general de la CEM, Leopoldo González, dijo que el campesino siempre ha estado desprotegido y el agro abandonado. La mayoría de los labriegos han quedado sin crédito y sus parcelas se han devastado y erosionado.
A su vez, Manuel Corral, encargado de relaciones institucionales y públicas de la CEM, se refirió a una reunión que sostuvieron con Alberto Cárdenas, en la cual éste les explicó las bondades del TLCAN, pero la pregunta es cómo los campesinos que viven en la pobreza van a acceder a esos beneficios que han llegado a la macro agricultura. “El campo es uno de los grandes problemas de México y por eso hace falta un plan estratégico”, agregó.
Señaló que “le comentaba al secretario que sobra gente en el campo pero ¿qué vamos a hacer con esa gente? No la vamos a dejar fuera, creo que hace falta un plan y los campesinos tienen que ser sujetos de este cambio que se viene dando”.
La Comisión Episcopal para la Pastoral Social, en el documento que analiza las consecuencias para los indígenas y campesinos por la desgravación arancelaria del TLCAN, convocó a la sociedad a acompañar a los agricultores, adquirir sus productos y apoyarles en todas las formas posibles, además de que consideró que es oportuno abrir un debate nacional sobre el papel del campo en la sociedad y en el futuro de México con el fin de encontrar caminos hacia otras políticas más incluyentes. “Todos tenemos un nivel de solidaridad con los campesinos, para escucharlos en sus justas demandas y acompañarlos en su lucha por una vida digna”.
Dijo que se deben alentar las cooperativas y las organizaciones de pequeños productores, para que los alimentos lleguen al mercado sin intermediarios y sean ellos mismos los beneficiados, así se podrán fortalecer los mercados locales y regionales y potenciar sus ingresos económicos.
En relación con la solicitud de renegociación el TLCAN, la comisión señaló que es injusto someter a los campesinos y productores a reglas y condiciones desiguales de producción ante otros países y agricultores, ya que esto genera una pobreza permanente y sistemática de la cual no se puede salir.
Consideró que se debe “construir una globalización de equidad y de justicia para la familia humana”, si vivimos en un mundo globalizado no se pueden restringir las oportunidades sólo al aspecto comercial, es necesario insistir en una política migratoria entre los tres países, “así como han acordado el tránsito de mercancías y la libre inversión, tendrían que procurar mecanismos para una migración ordenada y justa”.
Aseveró que es urgente e impostergable destinar más recursos al agro y cuidar su “recta aplicación” a fin de que lleguen a los pequeños productores y no sólo se queden en beneficio del aparato burocrático o de los agricultores con mayores recursos tanto de tierra como de capital; “hay que luchar contra la corrupción del sistema administrativo de los recursos y evitar la destrucción de las familias campesinas”, señaló la comisión.