Procuradores de ambas naciones se reúnen “ante creciente violencia del narco”
Ofrece Estados Unidos detener “el gran flujo” de armas hacia México
Mukasey anuncia el plan Gunrunner; control de la frontera, prioridad bilateral, asegura
El gobierno de Estados Unidos pondrá en marcha el proyecto Gunrunner, a fin de interrumpir el ingreso ilegal de armas a México y reducir la violencia que éste ocasiona en ambos lados de la frontera, anunció el procurador de Estados Unidos, Michael B. Mukasey, al término de un encuentro privado con su homólogo mexicano, Eduardo Medina Mora.
Asimismo, Mukasey reveló que personal de corporaciones estadunidenses, “como la DEA (agencia antidrogas), están trabajando con sus contrapartes en México para identificar y designar como blancos a los dirigentes de los cárteles y sus lugartenientes”.
En breve conferencia de prensa, ambos procuradores resaltaron que existe el compromiso del gobierno del país vecino para atender el problema que significa el gran flujo de armas ilegales que desde aquella nación llega a grupos del crimen organizado que operan en territorio mexicano.
Mukasey refirió también que la violencia ocurrida en México recientemente fue uno de los motivos que provocaron el encuentro entre ambos procuradores. Cabe recordar que sólo en los últimos cuatro días han sido ejecutadas más de 15 personas.
El procurador estadunidense refirió que el control de la frontera “es una prioridad importante de seguridad nacional para los dos gobiernos”.
Es en ese contexto que se enmarca la aplicación de mayores recursos “para arrestar y llevar a juicio a criminales violentos”, así como para “rastrear armas de fuego que utilizan bandas criminales en México y Estados Unidos”, dijo Mukasey.
Durante la sesión de preguntas y respuestas, Medina Mora refirió que en el encuentro con su homólogo estadunidense se analizaron temas como “el tráfico de drogas, el aseguramiento y decomiso de bienes, las acciones de combate al lavado de dinero, el tráfico y la trata de personas, el flujo de dinero en efectivo que entra a México procedente de Estados Unidos y el tráfico de armas de procedencia estadunidense que está en manos de la delincuencia organizada”.
En este último punto, el titular de la PGR señaló que el armamento que se introduce a México ilegalmente desde Estados Unidos da al crimen organizado “un considerable poder de fuego, que deriva en asesinatos de policías y agentes de seguridad y procuración de justicia”.
En ese sentido, Mukasey reveló que “el proyecto Gunrunner aborda precisamente el tráfico ilegal de armas hacia México, y las autoridades estadunidenses hemos puesto en vigor un programa para rastrear electrónicamente las que son encontradas y están relacionadas con algunos crímenes”.
La pretensión estadunidense es rastrear, hasta sus orígenes en Estados Unidos, el arsenal decomisado a los narcotraficantes mexicanos, dijo Mukasey, quien aseguró que se está investigando a los compradores de armas que no las adquieren para su uso legal en territorio estadunidense y, en caso de que se detecte que algún distribuidor está cometiendo actos ilícitos, se cancelarán sus licencias para vender arsenal y se le llevará a juicio.
En su oportunidad, el procurador mexicano dijo que en cuanto al tráfico ilegal de armas, se convino con Estados Unidos que “es indispensable establecer criterios comunes para el diagnóstico de esta problemática y diseñar una metodología que permita mayor y más oportuno intercambio de información sobre actos concretos, así como aumentar la capacidad tecnológica que permita compartir bases de datos en tiempo real”.
Finalmente, Medina Mora aceptó que, no obstante los avances y logros en cuanto a la cooperación con Estados Unidos, “es indispensable continuar atacando aquellos espacios de impunidad aún abiertos para la delincuencia organizada, como el flujo ilícito de armas y de dinero del país vecino hacia México, cuyas consecuencias directas resultan en el incremento de los niveles de violencia que se vive en algunas localidades del territorio nacional”.