La caja del tiempo encontrada en la torre oriente contiene medallas e imágenes de santos
Revelan testimonios de la época cuando se terminó de construir la Catedral
Necesario, tener un espacio dedicado a la memoria de la edificación del recinto: Xavier Cortés
Propone que se introduzca una nueva caja, con documentos actuales
Ampliar la imagen Imagen de Santa Bárbara, protectora contra los rayos, y que formaba parte del contenido de la caja del tiempo abierta hoy Foto: Cortesía CNCA
Ampliar la imagen Momento en que trabajadores abren la esfera que remata la torre oriente de la Catedral y encuentran la caja del tiempo, cuyo contenido fue revelado hoy Foto: Cortesía CNCA
La caja del tiempo que se encontró el 22 de octubre de 2007 en la torre oriente de la Catedral Metropolitana da testimonio del arte y de la cultura de hace 216 años, etapa floreciente de la Academia de San Carlos, expresó el director general de Sitios y Monumentos del Patrimonio Cultural del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA), Xavier Cortés Rocha.
Explicó que una de las expresiones más ricas y de mayor calidad en esa época fue el grabado, el cual se puede apreciar en las medallas y monedas que contenía la caja, de 15.5 por 8.2 centímetros. Incluir este tipo de objetos en las construcciones era una costumbre que se realizaba para dar testimonio de la época, incluso se han encontrado otras en edificios civiles y eclesiásticos.
También destacó que encontraron dos excelentes grabados dedicados a San Miguel y a Santa Bárbara, que era la protectora contra los rayos.
“Los grabados impresos tienen una pequeña firma que no ha sido interpretada y algunas de las medallas conmemorativas pueden atribuirse a Jerónimo Antonio Gil, quien alrededor del año 1779 fue el grabador mayor de la Casa de Moneda. Son grabados de excelentísima calidad.
“Es impresionante la calidad de las medallas y monedas, así como la del grabado que muestra los rostros de Carlos III y Carlos IV, que son impresionantes, se ve que estaba en su apogeo la Academia de San Carlos”, abundó el funcionario del CNCA.
De acuerdo con el especialista, la finalidad de la caja del tiempo fue dejar testimonio de la conclusión de los trabajos de la Catedral Metropolitana. “Los objetos encontrados dan un retrato de la sociedad novohispana de la época, de cuáles eran las cuestiones que consideraban importantes y que fueran recordadas”.
Cortés Rocha precisó que las medallas encontradas eran procedentes de las ciudades de Guadalajara, Guanajuato, Zacatecas, Campeche y Villahermosa. “Algunas fueron acuñadas por los propios cabildos de esas ciudades, esto refleja el interés nacional en el proyecto de la Catedral Metropolitana”.
El 22 de octubre del año pasado, durante la restauración del campanario oriente, se retiró el hemisferio superior de la esfera –que junto con la Cruz– remata la torre de la Catedral, y se encontró en el hemisferio inferior, la caja metálica con la inscripción “Mayo 14 de 1791”, que corresponde a la fecha de terminación de las obras por parte del arquitecto José Damián Ortiz de Castro.
Fueron encontradas en la caja 11 medallas de plata, cinco monedas de plata, 23 medallas de metal dorado, un pergamino, una cera de agnus, un relicario, cinco grabados de diferentes santos, un dibujo y cinco cruces de palma. El titular de Sitios y Monumentos señaló que en un futuro podrían exhibirse los objetos en distintos contextos, como en una muestra dedicada al autor de las torres, José Damián Ortiz de Castro, quien es poco conocido, porque se menciona más el nombre del arquitecto Manuel Tolsá, quien en realidad concluyó la fachada y los campanarios.
Asimismo, señaló que el hallazgo “plantea una reflexión sobre la necesidad de tener un espacio dedicado a la memoria de la construcción de la Catedral”, con planos, documentos y muestras de los materiales utilizados.
“Esta Catedral tiene una historia riquísima y un acervo muy importante. No existe un proyecto, pero habría que reflexionar sobre el asunto y sobre la mejor forma de conservar este hallazgo, para que sea conocido por toda la población.”
El arquitecto explicó que tenían conocimiento de la existencia de la caja por el hallazgo de otras, sin embargo, no la habían sacado antes porque es la primera vez que se quita en trabajos de restauración la parte superior de la esfera.
“Estamos obligados –añadió Cortés Rocha–, en la lógica de estas cajas del tiempo, a ingresar una nueva con testimonios de la época actual, con lo que consideremos más importante.”
Agregó que se tiene conocimiento de otra caja del tiempo en la segunda torre de la Catedral, aunque podría buscarse en los próximos años, cuando el plan de restauración llegue a ese lugar.
Especialistas en restauración y conservación continuarán con el tratamiento de los objetos encontrados, para darles estabilidad y buscar el mejor lugar donde puedan estar seguros.
Los trabajos de restauración en la Catedral Metropolitana han sido recurrentes. En la década de los 20 se realizó una intervención muy importante; en los años 40 se hizo otra relacionada con la cimentación del edificio; durante la década de los 90 se llevaron a cabo los trabajos de intervención para devolverle la estabilidad por medio de trabajos en el subsuelo y de un proceso de excavación.
A partir de 2001 se inició un plan maestro en las instalaciones, en los pavimentos y con las obras de arte. Actualmente se trabaja con la cantera, empezando con las torres y posteriormente comenzarán las laboress para enderezar la fuente del atrio oriente y terminará de restaurar los órganos de la Catedral.
Cortés Rocha señaló que esperan contar un presupuesto de 15 millones de pesos para continuar con la restauración en la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México.