Abercrombie & Ficth relanzará su publicación descontinuada en EU
Temen británicos que revista de tienda de modas pervierta a menores
Abercrombie & Fitch, la tienda de ropa que corteja el escándalo con la misma facilidad con que cambia inventarios, planea relanzar su revista cuatro años después de que la descontinuó en Estados Unidos entre acusaciones de que mostraba pornografía suave a los niños. La compañía corre el riesgo de desencadenar una reacción con sus atrevidas imágenes sexuales que, según los críticos, podrían ser un imán para adolescentes que anhelan sus atuendos colegiales.
La revista trimestral de A&F saldrá a la venta en abril, poco más de 12 meses después de la llegada de la empresa a costas británicas. Con provocativas fotografías de Bruce Weber, famoso por su inclinación por los efebos de hermosas facciones, la revista no será un catálogo ordinario de modas. Sus números más notorios, que en Estados Unidos provocaron protestas de una gobernadora, del procurador general de justicia y de muchas madres disgustadas, mostraban fotografías de modelos desnudos, entrevistas con estrellas porno y una guía de “cocteles para la diversión de vuelta al colegio”. En 2003 se suspendió su publicación.
Claude Knights, directora del organismo filantrópico Kidscape, comentó que si la versión 2008 no toma en cuenta el destino de su predecesora, “no vacilaremos en expresar graves preocupaciones sobre una revista picante dirigida a adolescentes que muestre contenido sexualmente explícito”.
Geethika Jayatilaka, subdirectora ejecutiva del organismo filantrópico 4Children, advierte que un “enfoque irresponsable” en las imágenes sexuales y los mensajes de promoción de bebidas alcohólicas dirigidos a jóvenes puede tener sombrías consecuencias. “El Reino Unido tiene una alta cultura de bebida y existen vínculos entre el uso del alcohol y el sexo que más tarde producen lamentos.”
En 1999, el número “Naughty or Nice” (“malo o bueno”) de la revista impulsó a la gobernadora de Illinois, Corinne Wood, a convocar un boicot de consumidores a la tienda, y cuatro estados amenazaron con emprender acciones legales en su contra.
Una fotografía de Santaclós y señora, al parecer fornicando, junto con el encabezado “A veces es bueno ser malo”, ofendió a muchos, al igual que un artículo en el que el “sexperto” de la tienda ofrecía consejo sobre sexo para tres. La respuesta de la compañía fue dejar de vender la revista a menores de 18 años, pero el contenido atrevido persistió. Lo mismo ocurrió con su popularidad: en su mejor momento alcanzó una circulación de 1.2 millones de ejemplares.
Una representante de la empresa dijo que la revista trimestral resucitada para el Reino Unido se apegaría a un “tema similar” al de sus contrapartes anteriores. “Será única y en definitiva capturará la atención del público”, afirmó. La firma utiliza los servicios del director creativo Sam Shahid, quien maneja sus escandalosas campañas publicitarias, para el lanzamiento de la revista en Londres.
En su nueva encarnación, la revista se dirigirá también a los mayores de 18 años, pero las madres y los organismos de caridad temen que, dada la popularidad de la tienda entre adolescentes, también le puedan echar un ojo los que según la ley no tienen edad aún para beber o tener sexo.
© The Independent
Traducción: Jorge Anaya