Estuvo por momentos de espaldas a los fieles, aunque pronunció la misa en italiano

Regresa Benedicto XVI a la celebración litúrgica de 1570

En el bautismo de hijos de empleados papales también recurrió al misal ordinario

Por primera vez oficia de esta forma desde que autorizó modificaciones al ritual

Afp

Ciudad del Vaticano, 13 de enero. Por primera vez en público, el papa Benedicto XVI celebró el domingo una misa de espaldas a los fieles, como se hacía en la antigua liturgia que el jefe de la Iglesia católica rehabilitó hace seis meses.

Durante el bautismo de 13 bebés de empleados del Vaticano, “el Papa estará en algunos momentos de espaldas a los fieles y mirando hacia la cruz”, había indicado antes la Oficina de las Celebraciones Litúrgicas al describir la misa que se desarrolló en la Capilla Sixtina.

“El resto de la celebración tendrá lugar como es habitual y se utilizará el misal ordinario, es decir, el introducido por Pablo VI después del Concilio Vaticano II”, indicó la oficina.

El Papa no pronunció la misa en latín, sino en la lengua vernácula, en este caso el italiano, como se hace tradicionalmente en la actualidad.

Desde julio pasado, Benedicto XVI decidió autorizar la celebración de la antigua misa en latín, según el Misal de San Pío V, para alegría de los católicos tradicionalistas.

El misal de san Pío V fue promulgado en 1570 luego del Concilio de Trento. Sufrió numerosas modificaciones, la última de las cuales data de la época de Juan XXIII en 1962. Por eso Benedicto XVI prefiere hablar del misal de “Juan XXIII”.

Éste contiene una oración por la conversión de los judíos en Viernes Santo, que conmemora la muerte de Jesús.

El misal de Pablo VI remplazó esa oración por otra que evoca a los judíos como el primer pueblo que “recibió la palabra de Dios”, pero no pide su conversión.

Dicho misal fue promulgado en 1970 después del Concilio Vaticano segundo. En este último, el sacerdote oficia la misa de cara a los fieles y en lenguas vernáculas.