Procesan a anciano de 90 años por el robo de una pileta
Mérida, Yuc., 13 de enero. Personal del juzgado primero de defensa social pidió la comparecencia del acusado. Con paso lento y trompicado, se acercó una persona de avanzada edad. Los abogados guardaron silencio.
Félix Bernabé Méndez Aké, de 90 años de edad, miope, enfermo y casi sordo, fue acusado por su sobrina política María Inés del Rosario Concha May de haberse robado una pileta de piedra para venderla en 900 pesos en el poblado rural de Muxupip, de donde ambos son originarios. Por estar acusado de robo calificado, el nonagenario no tendría derecho a libertad bajo fianza.
Félix Méndez fue detenido el viernes pasado y presentado en las rejillas.
La demandante afirmó que el anciano allanó su casa y que ella vive en un terreno propiedad del acusado.
Félix Bernabé reconoció que vendió la pileta a una persona llamada Luis Briceño. “Sí la vendí, pero estaba en mi propiedad. Mi sobrina política me acusó porque no recibió herencia y siempre quiso quitarme mi terreno, donde está mi casa”.
Con voz apenas audible, el anciano dijo ser víctima de una “canallada”.
Méndez Aké no recibe pensión ni es jubilado. Sobrevive de “trabajitos” y hace unos meses enviudó. De sus hijos no sabe casi nada. “Lo único que quiero es regresar a mi pueblo para hacerle una misa a mi esposa”, sostuvo.
La abogada del acusado, Auri Pech Garma, obtuvo una ampliación del término legal para determinar la situación legal del acusado y presentar pruebas en defensa de su cliente, que carece de dinero para enfrentar un juicio.
Según el Código Penal de Yucatán, los acusados de robo calificado no tienen derecho a fianza y sólo pueden ser liberados si el demandante les otorga el perdón. De lo contrario, la pena va de seis meses a cinco años de cárcel.