Una parte de la bancada del PRD podría aprobarla también: José Antonio Almazán
La reforma laboral, resurgimiento de la ley Abascal: especialistas y legisladores
Lozano conoce bien los compromisos que tiene en San Lázaro, dice el legislador
“La modificación busca flexibilizar las contrataciones; es una involución”, coinciden
La iniciativa para modificar la Ley Federal del Trabajo (LFT), que será presentada al Congreso de la Unión en poco más de un mes no es más que un relanzamiento de la denominada reforma Abascal, pero con añadiduras de propuestas hechas por empresarios y sus litigantes, afirmaron abogados laborales, académicos y legisladores, quienes apuntaron que estas modificaciones “flexibilizan las relaciones laborales de manera unilateral, son una involución y, en suma, una contrarreforma”.
Indicaron que es un proyecto que busca borrar más de cien años de lucha por los derechos laborales y “un retroceso disfrazado de modernización”. Asimismo, sostuvieron que si los sindicatos no se movilizan, será aprobado por los legisladores de los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN).
No obstante, el diputado perredista José Antonio Almazán dijo que también podría aceptarla una parte de sus compañeros de bancada. “La votación se va a integrar con los votos del blanquiazul y el PRI, aunque tal vez no voten todos los del tricolor, pero sí habrá algunos del sol azteca; a eso se refiere Javier Lozano (titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social) cuando habla de que habrá mayoría, pues conoce bien el grado de compromiso que tiene con sectores de la Cámara de Diputados”.
En entrevista, el diputado José Antonio Almazán sostuvo que la iniciativa es una redición de la ley Abascal; “es una contrarreforma”, dijo, y agregó que de no haber una manifestación contundente del movimiento obrero independiente, terminará siendo aprobada.
“La unidad sindical puede ser una salvación”
Coincidió con Almazán Alejandro Vega García, directivo e investigador del Centro de Investigación Laboral y Asesoría Sindical (Cilas) y ex líder del Situam, quien afirmó que ante la “alianza legislativa entre los partidos Acción Nacional y Revolucionario Institucional, que van a mayoritear la decisión”, la única posibilidad de revertirla es la “respuesta social, la movilización”.
Insistió en que lo que puede ser una salvación es “la unidad sindical contra este ataque sin precedente a conquistas que datan de hace un siglo. Lo que se debe entender es que esta reforma no sólo afectará a sindicatos, sino también a la sociedad en general, porque dará al traste con aspectos que incluso costaron vidas”.
En tanto, el abogado Arturo Alcalde Justiniani dijo que la situación “no es clara porque, al parecer, lo que se presentará es un conjunto de temas y no una iniciativa de ley –todos ellos retomados de otras iniciativas–, para hacerlo ver como lo mejor de las propuestas y, en buena medida, está sustentada en la ley Abascal, pero agregando temas de preocupación empresarial”.
Para Alcalde Justiniani, lo que se presentará a los legisladores es un compendio de distintas iniciativas, que retoman las “prioridades del sector empresarial”.
En esta propuesta –aseguró– “no habrá nada que promueva el proceso de democratización, el fortalecimiento de la contratación colectiva ni una justicia laboral imparcial”.
Alcalde Justiniani consideró que la modificación a la Ley Federal del Trabajo no tocará los temas fundamentales para permitir la modernización del mundo del trabajo, pero sí responderá a los intereses empresariales y socavará los derechos de los trabajadores.
Se han diagnosticado mal los problemas, señala académico
Por otro lado, Eduardo Torres Maldonado, académico e investigador del Departamento de derecho de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y secretario de asuntos educativos culturales y científicos de la Unión de Juristas de México (UJM), sostuvo que “si bien hay un reconocimiento de problemas laborales de 1982 a la fecha, hay un mal diagnóstico y por lo tanto lo que se pretende ver como remedio es un veneno social”.
El académico de la UAM agregó que derivado de ello, la “reforma neoliberal es una propuesta que intenta poner en bandeja de plata a los trabajadores para que sean más explotados por los empresarios”.
El académico Eduardo Torres Maldonado, quien es también uno de los autores del libro Reforma laboral y globalización en México, subrayó que esta propuesta impulsa la “flexibilización de la contratación, de salarios, jornadas y prestaciones”.
Se trata –finalizó Torres Maldonado– de una “copia de la reforma Abascal que limita a los sindicatos, pues a los gremios que no reporten en cierto tiempo su afiliación les será cancelado su registro, y también servirá para legitimar el outsourcing”.