La burbuja inflacionaria del primer trimestre se agravará con la desaceleración en EU
Caída de producción y fragilidad en la industria, prevé Concamin
Los sectores textil, de la confección, del calzado y el cuero, los más afectados; desempeño desigual en las ramas industriales, pronostica
Observa dificultades para acelerar el paso
Caídas en la producción de los sectores textil, de la confección, del calzado y el cuero, así como un desempeño desigual en las restantes siete ramas de la industria nacional pronosticó para este año la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin).
“Hemos comenzado 2008 con nubarrones en el horizonte mundial y una industria mexicana que sigue mostrando signos de fragilidad, creciente heterogeneidad entre sus componentes y dificultades para acelerar el paso”, advirtió el organismo al dar a conocer sus previsiones para este año en su órgano de difusión interna.
Concamin destacó que el primer trimestre de 2008 se caracterizará por “una burbuja inflacionaria, motivada por los aumentos en los precios de la gasolina, diesel, tarifas públicas, electricidad, gas, salarios, cemento, acero y sus derivados, todos bienes y servicios de amplio impacto sobre la economía familiar, los costos de las empresas y el nivel general de precios”.
Además, mencionó que tampoco resultan tranquilizadoras las noticias sobre la desaceleración económica de Estados Unidos, que podría provocar un decrecimiento por cuarto año, con lo que se afectarán las exportaciones de manufacturas mexicanas y el desarrollo económico del país.
“Este panorama anticipa que volveremos a crecer por abajo del potencial inherente a nuestra economía, y en el sector fabril seguirán abriéndose las brechas en el desempeño de sus componentes”, sentenció.
No obstante, apostó a que la inversión pública en infraestructura prometida por el gobierno federal contribuirá al desarrollo de la economía nacional para lograr que el sector obtenga en 2008 un crecimiento “ligeramente mayor” al de 2007.
Concamin, que este año cumple 90 años de actividad, se autodefine como el máximo organismo de representación del sector industrial, pues afilia a 46 cámaras, 19 cámaras regionales, tres cámaras genéricas y 40 asociaciones, entre ellas las de ramas tan importantes para la economía nacional como las de la construcción o el transporte. Se trata de 650 mil empresas afiliadas, que generan 40 por ciento del producto interno bruto y emplean a 13.2 millones de personas.
Habrá números rojos
En su análisis de año nuevo la confederación insistió en que buena parte de sus socios no estarán exentos de dificultades, al tiempo que destacó la persistencia de interrogantes sobre la calidad de la recuperación y la capacidad de la industria nacional para acelerar el paso.
Advirtió que dos de las nueve divisiones en que se divide el sector volverán a presentar números rojos, y siete tendrán aumentos en su producción que pueden oscilar de 1.4 por ciento hasta 6.8.
Concamin recordó que, pese a conservarse la estabilidad macroeconómica, 2007 no fue un buen año para las actividades fabriles que dependen del mercado interno, como las especialidades de manufactura ligera e intensiva de mano de obra, pues mostraron lento crecimiento y caída productiva.
“La industria nacional creció 1.7 por ciento y su principal componente, la manufactura, avanzó 1.4 por ciento. Ambos datos equivalen a la mitad del crecimiento de la economía, expresan el impacto de la desaceleración y la magnitud del esfuerzo a realizar para modernizar y dotar al sector fabril de los elementos para mejorar su desempeño”, destacó.
Para este año calculó que la industria tendrá un avance de 3.1 por ciento, apoyada en el repunte de la construcción y un mejor desempeño del sector manufacturero, cuyo crecimiento previó en 1.9 por ciento anual.
La representación industrial confió en que la inversión pública en infraestructura y el desarrollo del mercado interno sirvan de apoyo para que el crecimiento económico en 2008 sea ligeramente mayor al del año pasado.
La estabilidad en los principales indicadores financieros y un aumento moderado en la producción de bienes y servicios harán que la economía conserve el comportamiento de la segunda mitad de 2007, sin cambios significativos ni movimientos bruscos en réditos o tipo de cambio, pronostica.