El texto presenta fotos poco conocidas del autor tomadas por Daisy Ascher
El libro De Sayula al Olimpo aborda el proceso de iconización de Juan Rulfo
Las imágenes fueron captadas poco antes del homenaje nacional que se le hizo al escritor
Ampliar la imagen Rulfo y Daisy Ascher Foto: Tomada del libro De Sayula al Olimpo
En 1975 el pintor puertorriqueño Francisco Rodón llegó a la ciudad de México para pintar un óleo de Octavio Paz. El escritor no lo recibió y José Luis Cuevas le propuso que hiciera uno de Juan Rulfo.
Rulfo aceptó la propuesta y su retrato fue pintado en el estudio de Cuevas. En esta ocasión estuvo presente la fotógrafa Daisy Ascher, quien le solicitó al autor de Pedro Páramo tomarle algunas fotos, a lo que también accedió el escritor jalisciense.
Estas sesiones, realizadas en su mayoría en una casa deshabitada, sirvieron para que Ascher y Rulfo tuvieran un acercamiento más personal.
Esta historia, bastante desconocida, es narrada por Fabiola Ruiz, autora del libro De Sayula al Olimpo. La construcción intermedial del escritor Juan Rulfo como icono de la cultura nacional mexicana. Aportaciones de Daisy Ascher, José Luis Cuevas y Francisco Rodón.
Las imágenes reunidas en su libro son una especie de recorrido por la vida de Rulfo, que van desde su infancia hasta las fotos que le toma Ascher, cuando ya era un autor reconocido.
La fotógrafa logra captar a un Rulfo diferente, divirtiéndose al mirar las imágenes captadas por su amiga, tomando entre sus manos a una muñeca, recostado en un monumento y en otras retrata solamente sus ojos.
“Daisy era muy exigente para las fotos, y gracias a la gran comunicación que logra desarrollar con Rulfo, es que consigue tomar algunas fotos de los juegos de ambos.
“La misma Daisy lo dice en un libro muy poco publicitado que se llama Mis imágenes y mi muerte, que tuvo un tiraje de 3 mil ejemplares y ella retiró la edición, que hubo una atracción muy fuerte entre Rulfo y ella. Era un momento en que Rulfo estaba pasando por una etapa de una enorme depresión, que Daisy estaba recién divorciada, y que ese interés que había entre uno y otro, lo midieron porque no estaban bien”, detalla el libro.
La autora, que se tardó 13 años en recopilar el material reunido en su publicación y contó con la asesoría del profesor investigador colombiano Carlos Rincón, dijo que en 1980 Ascher le comentó a Juan José Bremer que quería hacer un libro con las fotos de Rulfo. Bremer respondió que tenía la intención de hacerle un homenaje al escritor y Daisy hizo una primera selección de ese material para el festejo.
“El libro aborda la iconización que hicieron Cuevas, Rodón y Ascher de Rulfo, porque él había publicado en 1975 Pedro Páramo, El llano en llamas, y una serie de ediciones en el extranjero. Ya era un autor reconocido, pero todavía no se daba el homenaje nacional, que fue el reconocimiento total.”
Esta serie de fotos, Ascher las facilitó a Ruiz antes de morir, pero la autora las complementó con otras que obtuvo de acervos privados.
Entre ellas aparece la foto del óleo de Rodón, que “hace muchos años fue vendido en Christie’s, en 187 mil dólares, pero nadie conoce a su dueño. Rulfo vio este óleo en Puerto Rico, en 1982.
“Del óleo no se habla, tampoco de Daisy y de Cuevas, porque es una información controlada y manipulada. La familia trata de dar una imagen de santo de Rulfo, buen padre, buen hombre, buen escritor, que sí lo fue, pero tratan de hacer un modelo”, dijo Ruiz.
De Sayula al Olimpo es una edición de Wissenschaftlicher Verlag Berlín y fue publicado hace tres años en Alemania, y según la autora, “ha sido muy bien vendido”.