Concede Yamena cambio de sede de condena
Trasladan a París a acusados de secuestro de niños en Chad
Yamena/Nairobi/París, 28 dic. Los seis empleados de la organización no gubernamental (ONG) francesa Arca de Zoé acusados de intento de secuestro de más de cien niños africanos en Chad salieron hoy del país centroafricano con destino a un aeropuerto militar cercano a París, informaron medios locales.
Tras dos meses de detención, se espera la llegada de los acusados y que sean trasladados a una dependencia penitenciaria francesa.
Los seis trabajadores fueron condenados hace dos días a ocho años de trabajos forzados en una prisión en Chad, pero un acuerdo entre Francia y su antigua colonia les permitirá cumplir su condena en el primero. Además, se les impusieron multas millonarias.
Horas antes de su traslado, Chad había aprobado la solicitud de extradición francesa, confirmó la emisora France Info. “Respondí favorablemente esta mañana a la petición de traslado”, dijo a la emisora británica BBC el ministro de Justicia chadiano, Albert Pahimi Padacké, quien, sin embargo, destacó que un indulto de los seis integrantes de la ONG sólo sería posible con el beneplácito del país africano.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, había exigido que los seis fueran juzgados en Francia, quien anunció que los sacaría de Chad, “independientemente de lo que hubieran hecho”, lo que desencadenó ira y protestas masivas en las calles Yamen, la capital chadiana.
El grupo fue arrestado en octubre cuando intentaba sacar del país a 103 niños, supuestos huérfanos de Darfur, hacia Europa, para entregarlos a familias francesas que habían financiado la acción, pero las investigaciones mostraron que los menores no procedían de la región en crisis sudanesa ni eran huérfanos.
Ahora, al gobierno francés se le critica, además, por no haber evitado correctamente esa acción, pese a que estaba informado de ella desde hacía meses. Según algunos medios, el Ministerio de Exteriores había advertido al respecto a la ONG, pero no informó lo suficiente a todas las autoridades afectadas.
La ONG se presentó en Chad con otro nombre y manifestó su intención de edificar un centro para niños necesitados, con lo que recibió ayuda logística de soldados franceses destacados en Chad.
Durante el proceso, el director de la organización, Eric Breteau, defendió “las buenas intenciones de la acción”, y culpó a sus trabajadores sudaneses, quienes presentaron a los niños como huérfanos.
Los menores, en tanto, fueron trasladados a un orfanato en el este de Chad, debido a la dificultad para ubicar a sus familias.