Portando cruces y coronas de espinas recorren 17 kilómetros de Tixtla a Chilpancingo

Familiares de normalistas marchan en Guerrero; demandan plazas

“Sólo queremos una vida mejor para nuestros hijos”, afirman

En Iguala, 400 estudiantes ocupan radiodifusora; denuncian “la corrupción que impera en la Secretaría de Educación estatal”

Sergio Ocampo y Misael Habana (Corresponsales)

Chilpancingo, Gro., 14 de diciembre. Cientos de padres de familia y alumnos egresados de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, portando cruces y coronas con espinas de huizache, recorrieron los 17 kilómetros que separan las instalaciones del plantel, fuera del municipio de Tixtla, hasta Chilpancingo, para demandar al gobernador Zeferino Torreblanca Galindo la entrega de 75 plazas para sus hijos, respeto a la licenciatura de primaria y cancelación de las órdenes de aprehensión contra sus compañeros.

Agotado, encadenado de la pierna derecha y con heridas provocadas por la corona de espinas, Gonzalo Molina, tío de Oscar Cotino Molina –quien fue golpeado por elementos de la Policía Federal Preventiva y de la Agencia Federal de Investigación durante el desalojo del 30 de noviembre de la caseta de peaje La Venta, de la Autopista del Sol, en Acapulco– manifestó: “Pensamos que al darle educación a nuestros hijos en la Normal de Ayotzinapa ya no vivirían en la pobreza como nosotros.

“Sin embargo, terminando su carrera se encontraron con otra realidad, al no tener trabajo, que es un derecho que les corresponde, por eso caminamos con unas cruces y coronas desde la ciudad de Tixtla, representando el sacrificio que como padre de familia hemos hecho por nuestros hijos, y seguimos sufriendo, mientras los legisladores federales están ganando 180 mil pesos (mensualmente), y aquí el pueblo sufriendo”, añadió.

Llamó a los alumnos de Ayotzinapa “a que no caigan en el juego de (el gobernador) Zeferino (Torreblanca)”, porque quiere imponerles condiciones que, de aceptarlas, “toda su vida serán recriminados”.

Los manifestantes llegaron al palacio de gobierno, donde efectuaron un plantón. Los vigilantes confundieron a uno de ellos con Víctor Alcaide Aguirre, coordinador de los diputados federales perredistas de Guerrero, quien tenía una audiencia con el secretario de Gobierno, Armando Chavarría Barrera, e incluso uno de los uniformados puso la mano en su pistola y le dijo “órale cabrón, éntrale”. El asunto no pasó de ahí.

Eric Téliz Sánchez, dirigente de los estudiantes de Ayotzinapa, lamentó la falta de acuerdos durante las pláticas que sostuvieron hoy con Chavarría Barrera. “No resolvió nada, por lo tanto continuamos con nuestro movimiento”, dijeron.

Por la tarde, en “una muestra de nuestra disposición al diálogo”, los estudiantes acordaron liberar unos 30 vehículos comerciales que tenían en su poder, así como tres autobuses de pasajeros ante la advertencia de los gobiernos estatal y federal de desalojarlos el 26 de diciembre–, aunque se quedaron con otros 30 unidades.

En Iguala, unos 400 normalistas, apoyados por integrantes de la organización Tierra y Libertad, marcharon y ocuparon las instalaciones de ABC Radio para difundir que la administración estatal se ha negado a corregir la corrupción que prevalece en la Secretaría de Educación de Guerrero, lo que impide la asignación de plazas a los egresados, pese a la falta de maestros en las zonas indígenas.

Los contingentes pretendían manifestarse durante la inauguración de la tienda de autoservicios Soriana, donde se esperaba la presencia del gobernador, quien no llegó.

Torreblanca Galindo sí asistió, en cambio, a la reinauguración del hotel Las Brisas, de Acapulco, donde dijo que las negociaciones con los normalistas continúan y el encargado de llevarlas por parte de su administración es el secretario de Gobierno, Armando Chavarría.

El mandatario estatal insistió en llamar a los normalistas a que encaucen sus manifestaciones “por la vía de la legalidad; mi gobierno será respetuoso de la libertad de expresión, de manifestación, pero ojalá piensen en no afectar los derechos e intereses de terceros”.

Mencionó que los normalistas han sido escuchados, han estado en la ciudad de México y “estamos en comunicación con la secretaria de Educación, Josefina Vázquez Mota, y con el presidente de la Comisión de Educación federal Tonatiuh Bravo; además a los manifestantes se les abrió y se les van a seguir abriendo espacios”.

Los normalistas advirtieron el jueves que seguirán sus manifestaciones e incluso amagan con manifestarse en Acapulco durante las fiestas de Navidad y Año Nuevo.

En otras declaraciones, Víctor Alcaide Aguirre, coordinador de los diputados federales perredistas de Guerrero, dijo que “estamos apretando para que se entreguen las plazas (a los egresados de Ayotzinapa); ya se tienen 90 plazas, ahora el problema es que el dirigente de la sección 14 del Sindicato Nacional de Trabajadiores de la Educación (SNTE), José Natividad Calixto Díaz, suelte las que tiene: en estos momentos solamente está ofreciendo 27 plazas, y eso es injusto”.

Con relación al supuesto pacto entre el gobernador Torreblanca Galindo y Elba Esther Gordillo Morales, presidenta del CEN del SNTE, quien habría negociado el nombramiento de José Luis González de la Vega en la Secretaría de Educación estatal, dijo que el PRD incluso ya solicitó la remoción del funcionario.

Lamentó la postura asumida por el Ejecutivo estatal, que en reiteradas ocasiones ha salido en defensa del titular de la SEG: “no sé por qué Zeferino no ha estado en esa sintonía, pero es un reclamo de las bases”.