Si el gobierno de Bush sigue negándose a reducir emisiones, no asistirá a más encuentros
La UE presiona a Estados Unidos con miras de lograr acuerdo en Bali
Mi país es el principal responsable de obstruir las negociaciones en la conferencia sobre cambio climático, afirmó Al Gore
Alega la Casa Blanca que el ex vicepresidente está equivocado
Hoy concluye la reunión convocada por la ONU
Hawai será la sede de la cita para enero
Ampliar la imagen Un indonesio traga fuego durante un festival de ONG ambientales, que se realiza de forma paralela a las negociaciones en busca del pacto que sucederá al Protocolo de Kyoto Foto: Ap
Nusa Dua, Indonesia, 13 de diciembre. La Unión Europea (UE) y Estados Unidos están acercando sus posiciones con la finalidad de lograr un acuerdo en la conferencia sobre cambio climático que se celebra en Bali, informaron hoy fuentes de la delegación europea. Tras una reunión entre el ministro alemán del Medio Ambiente, Sigmar Gabriel, y la jefa de la delegación estadunidense, Paula Dobriansky, ambas partes declararon que se puede “llegar a un acuerdo”. No obstante, por el momento se desconoce el contenido de ese eventual pacto.
Anteriormente, la UE había incrementado su presión amenazando con no participar en las próximas reuniones sobre el tema si Estados Unidos seguía negándose a aceptar un compromiso para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero. “Si no se llega a un acuerdo en Bali, no habrá más reuniones de los países de las principales economías”, dijo Gabriel, en referencia a la ronda de conversaciones sobre cambio climático organizada por Estados Unidos, que fue inaugurada en septiembre por el presidente George W. Bush.
Según la UE, no tiene sentido llevar a cabo más encuentros si no hay objetivos claros. Las próximas reuniones previstas tendrían lugar en enero y febrero, en Hawai y París, respectivamente.
Renuente postura
La delegación estadunidense sigue resistiéndose firmemente a la propuesta de que los países industrializados se comprometan a reducir sus emisiones de CO2 en 40 por ciento antes de 2020. “No tenemos que resolver todos los asuntos en Bali”, dijo Dobriansky. No obstante, Gabriel descartó un bloqueo total de la cumbre y señaló que Estados Unidos “no quiere quedar como país bloqueador”.
Mientras la Unión Europea, apoyada por la mayoría de los países en desarrollo, presiona fuertemente para que la meta de reducción sea incluida en el texto, la iniciativa es rechazada por Estados Unidos, Canadá, Japón y Australia, que consideran que una mención de números podría prejuzgar las negociaciones.
Entre tanto, el premio Nobel de la Paz Al Gore criticó a Estados Unidos por su actuación en en Bali, acusándolo de frenar los avances de las negociaciones. Instó a los participantes de la cumbre a caminar hacia adelante en la búsqueda de objetivos claros para el nuevo tratado sobre la protección del clima, sin tener en cuenta la posición estadunidense. Según afirmó, la postura estadunidense cambiará tras las elecciones del año que viene, antes de que culminen las negociaciones para un nuevo acuerdo.
“Voy a decirles una verdad incómoda: mi país, Estados Unidos, es principalmente responsable de la obstrucción de las negociaciones aquí en Bali”, afirmó Gore, provocando una gran ovación.
Por otro, lado, el secretario ejecutivo de la Convención de Naciones Unidas para el Cambio Climático, Yvo de Boer, manifestó su preocupación por las discrepancias entre la UE y Estados Unidos sobre las emisiones. “Si no hay diálogo en el futuro, todo el castillo de naipes se desmoronará”, señaló.
La urgencia de alcanzar un acuerdo se hizo más patente tras la publicación de un informe del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), en noviembre, que advirtió sobre una catástrofe irreversible causada por el calentamiento global si no se reducen rápidamente las emisiones de gases de efecto invernadero.
Así, las agrupaciones ecologistas urgieron a todos los países a comprometerse a hacer más por el medio ambiente y plantear propuestas formales para reducir la emisión de dióxido de carbono (CO2).
El grupo ambientalista Fondo Mundial para la Naturaleza afirmó que este año llegó el verdadero momento político que abrió las puertas a los ministros para acordar un tratado positivo, tanto para la gente como para la ecología.
“Los ministros necesitan distinguir la madera de los árboles e invertir personalmente en un paquete político que satisfaga la necesidades de un planeta afectado por el clima”, declaró Hans Verolme, director del programa contra el cambio climático de ese fondo mundial.
No puede permitirse el fracaso: Greenpeace
También el jefe de la organización Greenpeace, Gerd Leipold, advirtió que la opinión pública no aceptaría que la cumbre no tuviera éxito. “No creo que se produzca un fracaso total, porque ningún gobierno puede permitírselo, tampoco el estadunidense”, señaló.
La Casa Blanca dijo este jueves que el premio Nobel de la Paz, Al Gore, se equivoca al sostener que Estados Unidos es el obstáculo para el éxito de la conferencia de Bali, y que las declaraciones europeas sobre un posible boicot a una reunión sobre el clima de Hawai no son “constructivas”.
La vocera de la Casa Blanca, Dana Perino, intentó, sin embargo, minimizar las declaraciones sobre la posible ausencia de la Unión Europea en una conferencia sobre el clima, organizada por Estados Unidos en enero, destacando que ésa no parecía ser la posición oficial del bloque.
“Creo que se equivoca”, dijo Perino a la prensa, que le pidió su opinión acerca de las declaraciones del ex vicepresidente estadunidense, quien dijo que Estados Unidos era el principal obstáculo para un acuerdo sobre el clima en Bali.
Por su parte, la Unión Europea advirtió que el bloque podría no participar en una cumbre de los principales emisores de gases de efecto invernadero, organizada por Estados Unidos en Hawai en enero, si las negociaciones se desencarrilan en Bali.
“Si fracasamos en Bali, no tendría ningún sentido mantener esta reunión de principales emisores”, afirmó Humberto Rosa, ministro portugués de Medio Ambiente, cuyo país preside actualmente la UE.
James Connaughton, presidente del Consejo de la Casa Blanca sobre Calidad Medioambiental, rechazó esas acusaciones. “Cada país tiene una posición en esta negociación, no sólo Estados Unidos”, afirmó.