“El clima de inseguridad se recrudeció por la supuesta lucha contra el crimen organizado”
ONG suiza: la crisis en Oaxaca persiste por “el autoritarismo” de Ulises Ruiz
Oaxaca, Oax., 10 de diciembre. El hartazgo por el autoritarismo gobernante, la descomposición o ausencia de una cultura política, la falta de credibilidad del sistema político y los partidos, así como el juego perverso de los candidatos para mantenerse en el grupo de poder profundizó la crisis en Oaxaca, afirmó Susana Sutter, representante de la organización Peace Watch Swiss.
Al dar a conocer el estudio Oaxaca: democracia simulada, realizado con la organización no gubernamental local Servicios para una Educación Alternativa (Educa), señaló que la crisis sociopolítica persiste porque la respuesta del gobernador Ulises Ruiz Ortiz al conflcito “sigue siendo el autoritarismo y el uso de la fuerza pública”.
En conferencia de prensa que ofreció con Marcos Leyva Madrid y Sara Méndez Morales, integrantes de Educa, la activista suiza expuso que el conflicto sociopolítico en la entidad no está resuelto, sino al contrario, “el clima de inseguridad se ha recrudecido por la lucha supuestamente contra el crimen organizado”.
A ello, añadió, se sumó la total impunidad de la policía estatal, “la cual se perpetúa y se mantiene por el clima de violencia institucional, que deja en total desamparo los derechos humanos”.
Expuso que la crisis persiste y el conflicto social está presente porque el movimiento del magisterio y la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) aún protestan contra el gobernador Ulises Ruiz, por la liberación de los presos políticos y para exigir reformas fundamentales.
Consideró que Oaxaca atraviesa una crisis estructural, la cual se profundizó a partir de la represión ejercida el 14 de junio de 2006 por el gobierno del estado contra la sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, a cuyos miembros se sumaron amplios sectores sociales que sostuvieron una revuelta popular hasta finales de noviembre de ese año.
Al hacer un análisis sobre las elecciones del pasado 5 de agosto, que renovaron el Congreso local, resaltó que el abstencionismo da poca legitimidad a la nueva Legislatura y aunque el partido del gobierno, el PRI, tiene la mayoría absoluta, “solamente obtuvo una votación de 17 por ciento del total del electorado”.
Sostuvo que la situación política y social actual de Oaxaca, después de la profundización de la crisis en 2006, puso un telón de fondo aún más crispado y polarizado para renovar el Congreso local (el 5 de agosto) y las autoridades municipales que se rigen por el sistema de partidos políticos (el 7 de octubre), así como por usos y costumbres (en el transcurso de todo el año).
Sutter indicó que unas elecciones verdaderamente libres, transparentes y equitativas solamente se pueden garantizar si se llevan a cabo en un clima de paz y justicia social, legalidad y tranquilidad. Agregó que a escala federal ha habido una reforma electoral, pero en Oaxaca “simplemente no se ha iniciado”, por lo que es urgente una reforma del Estado.