Las Águilas ganaron 2-1, pero en el global 4-4 el cuadro argentino marcó uno más de visitante

América, a un gol de la Copa Sudamericana; Arsenal, campeón

“Es una vergüenza; no perdimos, el árbitro nos mató”, expresó el técnico Daniel Brailovsky de un supuesto penal sobre Cabañas que no sancionó

Andrés Andrizzi marcó la anotación del título, a ocho minutos del final

El cerrado marcador no reflejó el amplio dominio local

Agencias

Buenos Aires, 5 de diciembre. América se quedó a un gol de la Copa Sudamericana. Contra todo lo esperado, el equipo mexicano obtuvo un triunfo de 2-1, pero sólo le alcanzó para empatar el marcador global 4-4, con lo que Arsenal de Sarandí conquistó el título, por haber anotado un tanto más de visitante.

Fundamental fue el triunfo de 3-2 del cuadro argentino conseguido la semana pasada en el estgadio Azteca, ya que las Águilas necesitaban ganar por dos goles de diferencia para conquistar el cetro.

Y se quedaron a siete minutos de conseguirlo, hasta que el recién ingresado Andrés Andrizzi acortó el marcador y dio el título a su escuadra, uno de los cuadros modestos del futbol de Argentina.

El encuentro se llevó a cabo en el estadio Juan Domingo Perón del Racing Club ante unos 30 mil aficionados, con Diego Maradona en un palco y una pequeña porra mexicana.

El marcador no reflejó lo sucedido en la cancha, ya que Arsenal tuvo amplio dominio del encuentro, pero falló muchas oportunidades, mientras el club de Coapa concretó dos de las escasas oportunidades que se le presentaron.

La queja de Brailovsky

Al final, el técnico americanista Daniel Brailovsky se quejó amargamente del arbitraje del colombiano Óscar Ruiz, quien a su consideración no marcó un penal sobre Salvador Cabañas.

“Es una verdadera vergüenza, por el silbante perdimos. No perdimos, nos mataron, nos hicieron morir”, dijo camino al vestidor.

En el primer tiempo, con la obligación de ganar por dos goles de diferencia, las Águilas se lanzaron al frente y tuvieron el control del esférico, aunque les faltó profundidad para reflejarlo en el marcador.

Por su parte, el cuadro argentino se replegó en busca de mandar balonazos que tanto daño hicieron al equipo mexicano en el primer duelo.

El conjunto local tuvo la primera ocasión de gol, pero Andrés San Martín entregó su cabezazo a Guillermo Ochoa.

En una jugada fortuita, los amarillos se fueron al frente en el marcador. Al minuto 17, Alejandro Argüello y Óscar Rojas realizaron pared por la banda izquierda, y este último mandó centro a primer palo, donde el defensa Cristian Díaz se adelantó a su portero Mario Cuenca y mandó el balón a las redes para un autogol.

Arsenal dejó su actitud pasiva y abrumó por completo a una errática y nerviosa defensa visitante. Las llegadas se sucedieron continuamente, sobre todo en jugadas a balón parado, pero Ochoa contó con fortuna y mala puntería de los delanteros argentinos para mantener sin goles su meta.

Al 21, en un tiro libre, San Martín conectó su enésimo cabezazo, pero lo entregó a Ochoa, quien soltó el esférico y lo dejó a modo a José Luis Calderón, quien en el área chica y en forma increíble estrelló su remate en el poste izquierdo.

Calderón volvió a fallar ocho minutos después, cuando no aprovechó un rechazo y con tiro de bote pronto mandó el balón al travesaño. De inmediato el defensa Jossimar Mosquera llegó sin marca al área chica, pero cometió otro yerro grave.

Ochoa finalmente mostró su buen nivel en el 36, al desviar con lance felino un cabezazo de San Martín que iba a gol.

América se quitó el abrumador dominio hasta el 38, en un ingreso de Cabañas al área, pero Aníbal Matellán lo jaló del hombro y le metió el pie cuando enfilaba sobre el solitario arquero Cuenca.

Sin embargo, el árbitro Ruiz no marcó el penal, en una decisión localista.

El dominio de casa se mantuvo en el complemento, pero en su primera llegada América aumentó a 2-0. Villa mandó un pase que Cabañas no pudo controlar y el esférico llegó a banda izquierda, donde Juan Carlos Silva conectó con fuerza y venció al arquero Cuenca.

Ochoa siguió acertado en sus lances, pero al 68 ingresó Andrizzi, quien 15 minutos después definiría el duelo.

Por su parte, Brailovsky ingresó al zaguero Ismael Rodríguez para apuntalar su defensa, pero los americanistas rechazaban con problemas los acosos locales.

Federico Insúa pudo anotar el tercer tanto, al minuto 79, pero disparó sin fuerza y el arquero Cuenca detuvo.

Ochoa siguió activo, pero nada pudo hacer al 83, cuando Andrizzi evadió la floja marca de Villa y Castro; se levantó y burló a Davino y con tiro raso logró el definitivo 2-1.

Cerca del final ingresó Lucas Castromán, pero sólo duró dos minutos en la cancha y fue expulsado, al igual que Davino, con lo que las Águilas terminaron con nueve elementos.