La prensa de EU aplaude la derrota del presidente
Recomienda Bush el libre comercio para contrarrestar a Chávez en AL
Nueva York, 4 de diciembre. El presidente George W. Bush celebró la derrota de Hugo Chávez e instó a la promoción del libre comercio en los países latinoamericanos como la mejor manera de contrarrestar la influencia de los venezolanos en esta coyuntura.
Bush, los editorialistas del Wall Street Journal y otros analistas afirmaron que ante el revés sufrido por Chávez en el referendo, el mejor antídoto a su “agenda expansionista” y socialista en América Latina es la promoción del libre comercio.
Por primera vez, el presidente Bush calificó el voto en Venezuela: “el pueblo venezolano rechazó un régimen de un solo hombre, votó por la democracia”.
En rueda de prensa en Washington, el mandatario dijo que “Estados Unidos puede hacer la diferencia en Sudamérica en términos de la influencia venezolana… el Congreso debe aprobar el acuerdo de libre Comercio con Colombia”, y argumentó que la promoción de la democracia es mediante la diseminación del libre comercio en la región. No hacerlo con Colombia, provocaría “un momento desestabilizador”.
Enfatizó que se votó “por la democracia y la política estadunidense puede ayudar a promover democracia y estabilidad”.
Es una tarea un poco complicada para los editorialistas, analistas y funcionarios: cómo argumentar que la democracia fue ejercida plenamente en Venezuela empezando por el propio presidente que aceptó los resultados sin titubeos, y a la vez insistir en que Hugo Chávez continúa como amenaza a la democracia en todas partes.
A lo largo del país, los principales rotativos intentaron cumplir con esta tarea.
El New York Times optó por comparar las dos votaciones del domingo, la de Rusia y la de Venezuela, y acaba, de manera bastante retorcida, reprobando la de Vladimir Putin y pone como ejemplo para los rusos la elección venezolana.
Sin embargo, de nuevo afirma que Chávez sólo ha buscado concentrar cada vez más poder “usando la riqueza petrolera de su nación para comprar el apoyo popular”, y que en esta ocasión fue demasiado ambicioso, por eso fracasó. Advirtió que Chávez aún es “muy poderoso” y que este revés es sólo temporáneo.
Por fin, el Times admite que “a su crédito, rápidamente él aceptó los resultados”. Recomienda que la “comunidad internacional” debe continuar aplicando presión contra Chávez y Putin, ya que el venezolano “claramente no se ha convertido de repente en un demócrata”.
El Washington Post festejó la votación opinando que fue “una victoria en un país que estaba al borde de la autocracia”. Como el Times, el Post confiesa que Chávez merece “crédito” por aceptar la derrota, pero de nuevo arremete contra las políticas del venezolano a las que responsabiliza de la falta de alimentos básicos, inflación, crimen, corrupción y narcotráfico, así como su “comportamiento de payaso” en foros internacionales.
Afirma que la votación demostró que “venezolanos, ricos y pobres, no están dispuestos a ceder sus libertades básicas o apoyar la visión del señor Chávez como una versión de Fidel Castro en el siglo XXI”. Concluye que “tristemente, el resultado no restaura la plena democracia en Venezuela”, pero dice que si la oposición venezolana puede unirse en torno la “causa de la plena democracia, podría haber luz al final del largo túnel al que ha sido arrastrada Venezuela por Hugo Chávez”.
Otros rotativos ofrecieron similares evaluaciones en sus editoriales hoy. El Miami Herald advirtió que a pesar de la “victoria” del pueblo, “los venezolanos aún tienen un largo tramo que recorrer antes de reclamar la democracia que el señor Chávez ha estado desmantelando durante años”.
Pero el Wall Street Journal fue el más explícito en declarar que esta derrota ofrece una gran oportunidad para resucitar la agenda del libre comercio y el libre mercado, en recomendaciones casi idénticas a las del presidente Bush.
“El señor Chávez permanece como una amenaza para la región. Esta en una carrera contra el tiempo para imponer su voluntad antes de que se opaque su estrella, como ha sucedido ya en Perú, Brasil y México. Su agenda expansionista tiene el potencial de minar la democracia de Colombia, y ya ha desestabilizado a Bolivia y Ecuador”, afirmó en su editorial.
Ante esto, el periódico afirma que urge la aprobación de pactos de libre comercio “para abrir las economías” de Perú y Colombia, que están ante el Senado.
“No hay nada mejor que Estados Unidos pueda hacer para recompensar a los venezolanos por su valentía que arrancar la economía regional al implementar estos acuerdos (de libre comercio). Después de su acto el domingo, los venezolanos correctamente han ganado la atención de Estados Unidos y su apoyo”.
El Journal declaró que la votación fue “una victoria para el ideal de la libertad en América Latina. Ese ideal sería afirmado si ahora el Congreso de Estados Unidos hace su parte en mantenerlo vivo al votar por la liberalización del comercio con los (países) vecinos de Venezuela”.
O sea, la votación del no en el referendo venezolano ahora se desea transformar aquí en un voto del sí por el libre comercio, según la lógica del presidente Bush y el Wall Street Journal. Por cierto, esta tarde el Senado ratificó el acuerdo de libre comercio con Perú, acto elogiado por Bush y su gobierno como una aportación a la democracia y prosperidad del hemisferio.
¿No que se trataba de democracia?