OIT: mayoría de discapacitados, sin “empleo decente”
De 650 millones de personas discapacitadas en el planeta, 470 millones están en edad de laborar, pero la mayoría no consigue “trabajos decentes, es decir, bien remunerados y formales, lo cual contribuye a que la mayor parte de ellos, especialmente quienes habitan en países en desarrollo, no supere la línea de pobreza”.
De acuerdo con un informe elaborado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), denominado El derecho al trabajo decente de las personas con discapacidad, en años recientes ha habido importantes avances en la incorporación de éstas al mundo laboral, pero es necesario hacer nuevos esfuerzos para romper las barreras que aún les impiden contribuir al crecimiento económico de sus sociedades.
Asimismo, refiere que aproximadamente una de cada 10 personas en el mundo es discapacitada, y apunta que si bien muchos de los casi 500 millones que están en edad de laborar han conseguido un empleo y logran integrarse a la sociedad, aún sigue siendo “un grupo que enfrenta niveles desproporcionados de pobreza y desempleo”.
Ante ello, la OIT afirma que “es vital realizar esfuerzos significativos y sostenidos para promover la inclusión de estas personas al mercado laboral, el desarrollo rural y los programas de reducción de la pobreza”.
De igual forma, indica que “hay un estrecho vínculo entre discapacidad y pobreza. Ochenta por ciento de las personas con discapacidad vive en naciones en desarrollo, y entre ellas hay unos 426 millones que se encuentran por debajo de la línea de pobreza y con frecuencia forman parte del 15 a 20 por ciento de los más vulnerables y marginados entre los pobres en estos países”.
Según la OIT, “ofrecer empleo decente a las personas con discapacidad tiene sentido, tanto desde el punto de vista social como del económico”, pues estudios del Banco Mundial sostienen que la exclusión social en el lugar de trabajo cuesta a la economía mundial entre 1.37 y 1.94 billones de dólares”.