Analizan en Cuba avances de estudios sobre el escozul
La Habana, 28 de noviembre. Especialistas cubanos analizan desde este miércoles en Cienfuegos los resultados del uso del veneno de escorpión en la lucha contra el cáncer, trabajo que se encuentra en el contexto de un proyecto nacional cuyos orígenes datan de hace dos décadas.
En el curso sobre crianza, manejo y explotación de escorpiones, que concluirá el viernes, “se exponen los resultados del uso de la toxina del escorpión contra el cáncer”, señaló Fabio Linares, al frente del proyecto.
Citado por el diario Juventud Rebelde, Linares destacó que su país “ha ganado mucho en el aprendizaje del manejo del alacrán para tales fines” y que el proyecto es promovido por los Laboratorios Biológicos Farmacéuticos (Labiofam), de La Habana.
Desde la década de los años 90, Cuba aplica a sus enfermos de cáncer el escozul, producto elaborado por Labiofam a partir de veneno de alacrán, con resultados sorprendentes.
Efectividad
El rotativo subrayó que estudios científicos demostraron que el efecto anticancerígeno del medicamento preparado a partir del veneno de escorpión “resulta efectivo sobre todo en tumores y afecciones del sistema nervioso central”.
También fueron “comprobados sus beneficios en otras partes del organismo, como el pulmón, el cuello del útero, la próstata y el páncreas, y corroboradas sus propiedades analgésicas y antinflamatorias”.
Según la bióloga cubana Josefina Cao, también citada por el diario, “los descubrimientos empíricos de las propiedades” terapéuticas del veneno del alacrán colorado, también denominado azul por el tono de su aguijón, “comenzaron hace dos décadas en Guantánamo”.