El maltrato doméstico comparte sus principales rasgos en todo el mundo
Un mito, asociar pobreza con la violencia contra las mujeres: Cepal
En América Latina ni crecimiento económico ni democracia han mitigado el problema
Santiago, 26 de noviembre. La violencia contra las mujeres es una constante en todos los países de América Latina, donde a pesar del crecimiento económico de años recientes, las cifras se mantienen en registros muy altos, con una incidencia de entre 30 y 60 por ciento, según un estudio de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Las mujeres son violentadas física, sexual y sicológicamente en todos los países de América Latina, sin importar su origen social, racial o étnico, según el estudio ¡Ni una más! El derecho a vivir una vida libre de violencia en América Latina.
El documento, que fue elaborado por varias agencias de Naciones Unidas, fue presentado en la sede de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), en una ceremonia que contó con la presencia de la vicesecretaria general de la ONU, Asha-Rose Migiro, ex ministra de Tanzania. “Es un tema que afecta a cientos de millones de mujeres en el mundo”, dijo Migiro, quien resaltó que América Latina es la única región del planeta que cuenta con una convención especial sobre la violencia contra las mujeres.
El informe presentado este lunes no entrega una cifra global de violencia en la región, ya que advierte que precisamente la falta de información y denuncia es uno de los principales obstáculos a la hora de evaluar el impacto de las agresiones.
“No hay cifras sistematizas de la violencia en contra de las mujeres. Los pocos datos que hay no son comparables”, afirmó el secretario general de la Cepal, José Luis Machinea.
El estudio concluye que “la violencia contra las mujeres es una constante en todos los países de la región, mostrando que la mayoría son violentadas principalmente por sus parejas o compañeros íntimos, ex parejas u otros hombres de la familia o conocidos”.
La situación de la región es similar a lo que sucede en África y Europa. “Las mujeres de América Latina y el Caribe no son más ni menos víctimas que el resto de las mujeres del planeta y la violencia comparte los principales rasgos que se identifican en otros lugares del mundo”, señala el informe.
En la región, agrega el texto, la “violencia amenaza a todas, independientemente de su origen social, racial y étnico”.
“Uno de los mitos en torno a la violencia es que se la asocia a la pobreza. Los datos sugieren que la educación no es un factor de protección contra la violencia”, señala el documento.
En América Latina es que ni el crecimiento económico de los años recientes ni el predominio de la democracia han hecho descender los indicadores.
Además de la violencia doméstica, las mujeres latinoamericanas son también víctimas en el ámbito laboral, donde reciben un salario 30 por ciento menor al de un varón realizando el mismo trabajo.