Desciende por la crisis poselectoral y el conflicto en Oaxaca: fundación Konrad Adenauer
México, en semáforo rojo en el índice de desarrollo democrático en AL
Este año obtuvo el peor desempeño en la medición de desestabilización y crisis de gobierno
En lo económico también va a la baja, pese a que “el PIB per cápita mejoró en más de 10%”
México descendió en más de 6 por ciento en su evaluación anual del Índice de Desarrollo Democrático en América Latina (IDD-Lat 2007), entre otras razones por la crisis institucional en que cayó luego de los resultados de la elección presidencial de 2006 y el conflicto en Oaxaca, informaron Christoph Korneli, de la Fundación Konrad Adenauer, y Jorge Arias, consultor de Política Latinoamericana (Polilat.com).
La crisis poselectoral “castigó” en 20 por ciento el valor de la “calidad institucional y eficiencia política” del país, aunado a que este año obtuvo el peor desempeño en el indicador de “desestabilización y crisis de gobierno”, subrayó Arias.
En conferencia de prensa, en la sede de la Fundación Konrad Adenauer, Arias destacó que influyó en ese descenso el hecho de que la sociedad mexicana se escindió en dos partes tras las elecciones presidenciales: “sólo media sociedad se sentía representada por un gobierno electo”.
Tal fenómeno ubicó al país en una situación de “semáforo en rojo”, pues según consigna el IDD-Lat2007, se agravó “fuertemente” el indicador relativo a la “desestabilización”, mientras que el de las “libertades civiles y el de la anormalidad democrática” decrecieron “levemente”.
A la fecha, esos índices aún no reflejan una mejoría, explicó Arias, ya que “apenas (el país) está cicatrizando, en tanto que se encuentra en un trance de superación de la división expresada en las urnas”.
Otro decrecimiento se refleja en la “calidad institucional y eficiencia política”, renglones en los cuales nuestro país se ubica incluso por debajo del promedio obtenido por los 18 países de la región evaluados en el IDD-Lat 2007.
“Este deterioro fue motorizado por el peor desempeño en el indicador de desestabilización y porque este año México es castigado levemente por el factor de anormalidad democrática, debido a la crisis institucional provocada luego de las elecciones presidenciales y por los hechos (de violencia) ocurridos en Oaxaca”. Su puntuación posiciona al país en el lugar 13 de entre los 18 países de la región.
Ambos índices incluyen el de la percepción de la corrupción; la participación de los partidos políticos en el Legislativo; el accountability (institucionalización legal, política y social), y el indicador de desestabilización y crisis de gobierno.
En lo económico el país también decreció, a pesar de que su producto interno bruto per cápita mejoró en más de 10 por ciento; esto “se debe fundamentalmente a la ampliación de la brecha de ingresos”. No obstante, en “lo social el desempeño ha sido mejor y se evidencia en indicadores de mortalidad infantil, hogares bajo la línea de la pobreza, desempleo urbano y gasto público en educación”.
Respecto de los países de la región con alto desarrollo democrático, sobresalen Chile, Uruguay y Costa Rica (con una calificación de 7.5 a 10 puntos); con desarrollo democrático bajo (de 1.0 a 4.5) se encuentran Perú, El Salvador, Paraguay, Guatemala, Bolivia, Ecuador, Venezuela, Nicaragua y República Dominicana. El grupo de países con desarrollo democrático medio (4.51 a 7.5) está conformado por Panamá, Argentina, México, Honduras, Colombia y Brasil.
El índice, elaborado por Polilat.com y la Fundación Konrad Adenauer, revela que sólo 17 por ciento de los países de América Latina (no se incluye a Cuba, por estimar que no cumple los requisitos medidos en los otros) “se destaca por su alto desarrollo democrático”, mientras que la mayoría se encuentra en los niveles bajos.