Tiene el venezolano un “proyecto expansionista”, denuncia
Uribe: necesitamos mediadores, no legitimadores del terrorismo
La senadora Piedad Córdoba, acusada de traición a la patria
“Miserable”, la actitud del presidente colombiano: las FARC
Ampliar la imagen Álvaro Uribe, presidente de Colombia, al defender –el pasado jueves en la ciudad de Cota– el fin de la mediación de su par venezolano, Hugo Chávez, en la negociación para un canje humanitario con las FARC Foto: Ap
Santafé de Bogotá, 25 de noviembre. “Sus palabras, sus actitudes, dan la impresión de que no está interesado en la paz de Colombia, sino en que Colombia sea víctima de un gobierno terrorista de las FARC” (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia), afirmó hoy el presidente Álvaro Uribe al responder a su par venezolano Hugo Chávez, quien este domingo le responsabilizó directamente de la cancelación de un canje humanitario con la guerrilla.
“Nosotros necesitamos una mediación con el terrorismo y no legitimadores del terrorismo”, dijo Uribe respecto de su decisión de dar por concluida la mediación del venezolano y la facilitación de la senadora colombiana de oposición, Piedad Córdoba, en el proceso de canje de medio millar de guerrilleros presos por 49 rehenes en manos de la organización insurgente.
En declaraciones hechas durante una visita a la localidad de Calamar, en el norte del país, Uribe dijo que Chávez fomenta “un proyecto expansionista en el continente”.
“No se puede incendiar el continente como usted lo hace hablando un día contra España, al otro contra Estados Unidos, maltratando un día a México, al siguiente a Perú y la mañana después a Bolivia”, manifestó.
“No se puede maltratar al continente e incendiarlo como usted lo hace hablando de imperialismos, cuando usted, basado en su presupuesto, quiere montar un imperio”, puntualizó Uribe, quien también arremetió contra la senadora Córdoba.
Uribe sostuvo que la reciente visita que la legisladora hizo a un dirigente de las FARC preso en Estados Unidos e incluido en la lista de canjeables, “se habló de la necesidad de un gobierno de transición en Colombia”.
“Eso nos da derecho a los colombianos a interpretar que la mediación a la cual lo invitó a usted la senadora Córdoba, de acuerdo con las actitudes de ella, estaba más interesada en posibilitar un gobierno con influencia del terrorismo en Colombia, que en ayudarnos a superar la tragedia de los secuestrados y a conseguir la paz”.
Al reaccionar por primera vez a la determinación de Uribe, uno de los comandantes de las FARC, Iván Márquez, dijo que la actitud del gobernante es “muy miserable”, porque “era la única esperanza para lograr el canje de prisioneros”.
“Un saludo deferente (de Chávez) a un general no es ninguna amenaza a la soberanía como sí lo es la dependencia y la subordinación de toda la cúpula militar colombiana al Comando Sur del ejército de Estados Unidos”, dijo en referencia a la comunicación telefónica que el gobernante venezolano tuvo la semana pasada desde París con un alto jefe militar colombiano.
“Para que haya canje y paz requerimos de un nuevo gobierno verdaderamente democrático, fundado en la soberanía del pueblo y en la justicia social”, afirmó Márquez, quien añadió: “una guerrilla bolivariana como las FARC no se va a dejar amordazar por un gobierno cuestionado e ilegítimo, mafioso y paramilitar como el de Bogotá”.
El miércoles por la noche, el gobierno de Uribe anunció abruptamente la cancelación de los buenos oficios de Chávez y Córdoba, quien hoy dio a conocer que después de haber realizado esas gestiones durante tres meses y medio, la Corte Suprema de Justicia le notificó el inicio de una investigación en su contra por “concierto para delinquir y traición a la patria”.
Córdoba, que estableció contacto con dirigentes de las FARC durante su trabajo como facilitadora del acuerdo humanitario, no ofreció detalles sobre la notificación del tribunal ni precisó si la actuación judicial esté relacionada con esas labores.
La senadora fue criticada por políticos vinculados al gobierno de Uribe por haberse reunido en la selva con Márquez y el canciller de las FARC, Rodrigo Granda.
Uno de los blancos específicos de las críticas fue una fotografía publicada en un sitio en Internet cercano a la organización rebelde, en la que apareció Córdoba con una boina de las FARC.
“Obviamente debo asumir esta investigación y presentarme ante la Corte en el momento en que me citen”, dijo Córdoba desde Caracas a la colombiana Radio Caracol.
En tanto, el director de la policía colombiana, Oscar Naranjo, acusó al periodista William Parra, del canal multinacional Telesur de “secuestro” por haber entrevistado a un policía rehén de la guerrilla de las FARC, con lo que se amplió la lista de reporteros estigmatizados por su actitud crítica frente al gobierno de Uribe.